Un carro cayó este viernes en una enorme zanja abierta en la calzada por la empresa Aguas de La Habana en el municipio Cerro, lo que provocó daños significativos en su carrocería.
El incidente ocurrió en la esquina de la calle Santa Catalina y la avenida Boyeros, cerca de la Ciudad Deportiva y en el límite entre los municipios Plaza y Cerro.
“Accidente en Santa Catalina y Boyeros. La empresa Aguas de La Habana rompió la calle para hacer un arreglo y, como siempre, [no colocó] ninguna señalización informando de trabajos en la vía”, reportó un usuario en el grupo de Facebook Accidentes Automovilísticos en Cuba. Imágenes compartidas por el usuario mostraron la magnitud del accidente, con el automóvil completamente dañado tras caer en la zanja. Como indicó el reportero, no había ningún tipo de señalización que advirtiera del estado de la vía.
Hasta el momento de redactar esta nota, ni las autoridades ni la prensa oficial se han pronunciado sobre lo ocurrido. Se desconoce por qué el auto terminó en la zanja, más allá de la falta de señales o barreras que pudieran haberlo evitado.
En los comentarios de la publicación, muchos conductores criticaron la ausencia de señalización adecuada y algunos sugirieron que el auto podría haber circulado a exceso de velocidad. Casi todos coincidieron en que nadie asumirá la responsabilidad por los daños al propietario del vehículo.
No es la primera vez que Aguas de La Habana lleva a cabo obras en la vía pública sin colocar las señales de advertencia correspondientes, lo que ha provocado accidentes similares en el pasado. En octubre de 2022, un auto cayó en otra zanja en las calles Vento y Aranguren, también excavada por la empresa.
«Eso es en Vento y Aranguren, un hueco que Aguas de La Habana abrió un día para hacer la conductora que abastece el barrio La Guayaba y nunca cerró», aclaró un usuario en el mencionado grupo de Facebook.
Varios comentaristas mencionaron que el conductor del vehículo probablemente no conocía la zona, ya que la zanja había estado allí por mucho tiempo. «Ese hueco ya es patrimonio de esa calle, estoy cansado de verlo», afirmó uno de los comentaristas.
En mayo de ese mismo año, un camión de Comunales cayó en otra zanja excavada por Aguas de La Habana en el reparto Dolores, en la zona conocida como Caballo Blanco. «Los choferes no tienen por qué enfrentarse a tales riesgos. Las obras se terminan cuanto antes y se señalizan correctamente, y solo así se evitan esos desastres», comentó un usuario en el grupo de Facebook.
El autor del post también cuestionó el estado de la calle, llena de fango y agua por la lluvia, y los restos dejados por Aguas de La Habana que ocultaban el hueco. «En ese tramo hay más de cuatro huecos. Eso es una zanja de más de 100 metros llena de fango y cubierta de agua turbia (la mezcla perfecta para el desastre), y justo en la esquina siguiente hay otro hueco sepultado en fango blando donde más de uno se ha atascado. Ese sí lleva años así y no lo acaban de arreglar», detalló.
