Los residentes de Ciénaga de Zapata, en Cuba, están enfrentando una situación sanitaria desesperante. Los prolongados apagones y un brote de enfermedades transmitidas por mosquitos han llevado a los habitantes a tomar medidas extremas para protegerse, encendiendo fuego para ahuyentar a los mosquitos y jejenes que invaden la zona.
Un vecino afectado, a través de la cuenta de Saúl Manuel, comenta: “Buenas hermano, mire como está la Ciénaga de Zapata, que por su situación geográfica es unos de los lugares donde más abunda el mosquito y el jején”. La situación se agrava por la combinación de apagones catastróficos y un brote de dengue y otros virus, exacerbado por la falta de medicamentos y atención del gobierno.
La Desesperación de los Habitantes
Los apagones no solo impiden el uso de ventiladores y otros métodos de protección contra los mosquitos, sino que también complican la refrigeración de medicamentos y alimentos. En respuesta a esta crisis, los vecinos han decidido quemar basura y otros materiales para crear humo y ahuyentar a los insectos. Aunque esta práctica es momentáneamente efectiva, también conlleva riesgos significativos, como la inhalación de humo y la posibilidad de incendios.
“Los apagones son catastróficos y hay un brote de dengue y el nuevo virus. No hay medicamentos ni nada, y así a este gobierno le importa una mierda su pueblo. Mira cómo están las personas para poder ahuyentarlos, hay niños y ancianos viviendo este infierno, esto es criminal”, señala otro vecino, destacando la gravedad de la situación, especialmente para los más vulnerables, como niños y ancianos, que están expuestos a condiciones extremas y peligrosas.
Impacto en la Comunidad
La situación es especialmente alarmante para los más vulnerables que son los niños y ancianos que están expuestos a estas condiciones extremas. Los apagones no solo impiden el uso de ventiladores y otros métodos de protección, sino que también complica la refrigeración de medicamentos y alimentos.
A pesar de los riesgos, los vecinos de Ciénaga de Zapata continúan recurriendo a estas medidas desesperadas en un intento por protegerse. La falta de atención del gobierno cubano a las necesidades básicas de los ciudadanos, especialmente en esta zona, agrava aún más la crisis. La infraestructura deficiente y la falta de servicios básicos dejan a la población sin opciones viables para enfrentar esta emergencia sanitaria.