En medio de la profunda crisis económica que atraviesa Cuba, otro grave caso de corrupción ha salido a la luz, esta vez relacionado con el suministro de aceite comestible. La situación se ha vuelto alarmante, especialmente para los ciudadanos que dependen de este producto básico.
Fuentes anónimas desde Santiago de Cuba informaron a la redacción del medio Periódico Cubano sobre una alarmante situación con el suministro de aceite destinado a la provincia de Holguín. Según estas fuentes, el aceite que llegó a la Ciudad de los Parques procedente de Santiago de Cuba estaba adulterado con agua. «Detectaron que el aceite que llevaron de la fábrica de aquí para Holguín fue mitad de agua y mitad de aceite”, afirmó una fuente que prefirió mantenerse en el anonimato. Este caso está actualmente bajo investigación.
El aceite en cuestión es elaborado por la Empresa Refinadora de Aceites Comestibles en Santiago de Cuba y se distribuye a granel a diversas provincias orientales, incluido Holguín, para venderlo en las bodegas de abastecimiento. Esta práctica de adulteración no solo afecta la calidad del producto, sino que también pone en riesgo la salud de los consumidores.
Hasta el momento, el régimen no ha reconocido públicamente ningún problema con el aceite, manteniendo un silencio absoluto sobre cualquier incidente que podría manchar su imagen. Es probable que, cuando descubran cómo se mezclaron pipas enteras de aceite con agua sin que nadie lo notara, lo expongan en televisión nacional. El reporte que nos llega desde la provincia oriental no especifica si hay alguien detenido por el hecho.
Fuentes consultadas en Holguín no pueden asegurar que el producto traiga agua, lo que podría indicar que el adulteramiento fue detectado antes de que saliera a la venta. Sin embargo, la escasez y la irregularidad en la distribución del aceite complican cualquier intento de verificación. «El aceite en este año solo vino el mes de febrero y el de abril… en la calle se está comentando mucho que están vendiendo aceite inventado, que solo es aceite lo de arriba y abajo es un líquido amarillo», comunicaron habitantes de la provincia.
Este caso de adulteración es solo una muestra más de la extendida corrupción en Cuba, que afecta a los ciudadanos comunes. Justo este martes, salió a relucir una investigación exhaustiva en la terminal multipropósito del puerto Guillermón Moncada en Santiago de Cuba. Según un reporte de la Televisión Cubana, una masiva red de corrupción que involucraba a 78 personas, incluidas autoridades marítimas, fitosanitarias, estibadores y transportistas, fue desmantelada. Esta red se confabulaba para robar decenas de toneladas de productos de la canasta básica importados.
De los involucrados, 59 están en prisión provisional y 19 bajo medidas cautelares no detentivas. La red malversó productos como arroz, frijoles, azúcar y harina de soya, que luego vendían en mercados informales. La operación causó pérdidas superiores a los nueve millones de pesos en 2023, con vehículos y bienes decomisados.