Un impresionante suceso sacudió la tranquila mañana del 11 de abril en la Cantera de Arenisca de Cárdenas, situada en el occidente de Cuba. Dos hombres se enfrentaron a la muerte cuando un bloque de roca se desplomó sobre ellos mientras trabajaban en el lugar.
La noticia, confirmada por una breve nota de la prensa local en Matanzas, reveló que los cubanos se encontraban realizando labores en la cantera cuando una elevación del terreno colapsó sobre ellos, dejándolos parcialmente aplastados por la arenisca.
Afortunadamente, el rápido accionar de los equipos de rescate permitió sacar a los trabajadores del sitio y trasladarlos de inmediato al hospital más cercano para recibir atención médica por sus graves lesiones.
Aunque la información proporcionada no identificó a los dos trabajadores por sus nombres, se especificó que se trataba del operador de una grúa y el jefe del establecimiento. Ambos hombres resultaron gravemente heridos en el accidente.
La nota compartida en redes sociales detalla el alcance de las lesiones sufridas por los trabajadores: «Uno sufrió daños que requirieron atención maxilofacial (frente y mentón), mientras que el otro se mantiene en observación debido a una fractura de tibia y contusión pulmonar».
Este incidente pone de manifiesto los riesgos inherentes a las labores en canteras y la importancia de mantener altos estándares de seguridad en el lugar de trabajo. Sin embargo, también resalta la valentía y la fortaleza de estos dos hombres, quienes luchan por recuperarse de este trágico suceso. Su historia de supervivencia es un recordatorio de la resiliencia del espíritu humano frente a la adversidad.
