Manuel Marrero Cruz, nacido en la provincia de Holguín el 11 de julio de 1963, es un personaje destacado en la escena política cubana. Actualmente, ocupa el cargo de primer ministro de Cuba, pero su trayectoria está marcada por su pasado militar y sus vínculos con figuras clave del régimen.
Graduado como arquitecto, Marrero Cruz ingresó en las Fuerzas Armadas cubanas, donde ascendió al rango de coronel. Durante su tiempo en el ejército, fue influenciado por líderes militares como Julio Casas Regueiro y Luis Alberto López-Callejas, quienes lo reconocieron como un fiel seguidor del Partido Comunista y lo impulsaron hacia roles de liderazgo.
Su incursión en el sector turístico cubano marcó un hito en su carrera. Inicialmente, Marrero Cruz se involucró en la construcción de varios hoteles, destacando su labor en proyectos como el Hotel «Río de Luna» y «Río de Mares» en la provincia de Holguín. Con el tiempo, ascendió a puestos directivos en el sector, llegando a dirigir complejos hoteleros en Varadero y otras regiones turísticas importantes.
En 2004, Marrero Cruz fue nombrado ministro del Turismo, una posición que ocuparía durante quince años. Este prolongado mandato demuestra la confianza que el régimen militar tenía en él y su habilidad para gestionar un sector crucial para la economía cubana.
A pesar de su éxito en el ámbito turístico, Marrero Cruz fue promovido a primer ministro en diciembre de 2019, cuando el cargo fue reintroducido en la Constitución cubana. Esta designación fue respaldada por el Buró Político del Comité Central del Partido Comunista, lo que subraya su influencia dentro del establecimiento político de Cuba.
Aunque las reseñas oficiales de Marrero Cruz tienden a omitir su pasado militar, su ascenso meteórico y su larga carrera en el sector turístico lo convierten en una figura intrigante en la política cubana. Su historia es un testimonio del complejo entramado de poder en la Isla y su papel como uno de los principales líderes civiles con raíces militares.