El cubano Antonio Oscar Pino Urrutia, quien asegura haber sido preso político en el pasado, optó por cerrar su cuenta en Bank of America al descubrir que esta entidad bancaria permitirá a los dueños de Mipymes depositar su dinero en ella, como parte de una serie de medidas impulsadas por la administración del presidente Joe Biden para respaldar a estas empresas.
Pino Urrutia, cliente de Bank of America durante más de cinco años, contactó al banco en busca de una explicación sobre esta nueva política. En un video, expresó su profundo descontento: «No dejaré mi dinero donde se encuentren los fondos de los comunistas. Yo soy cubano y es increíble que Bank of America se preste para guardarle dinero a una narco dictadura que tiene a menores de edad presos y miles de muertos entre niños, mujeres y ancianos.»
El cubano, visiblemente indignado, añadió: «Millones de cubanos hemos tenido que huir de la narco dictadura. El cubano de a pie no tendrá acceso a guardar dinero en bancos estadounidenses, ni siquiera tienen dólares. No puedo estar en el mismo banco que alberga los fondos de los comunistas.»
La medida que desató la controversia implica una flexibilización de las condiciones para que las medianas y pequeñas empresas autorizadas por el régimen de La Habana puedan acceder al sistema bancario estadounidense. Esta iniciativa forma parte de la estrategia del gobierno de Biden, que ve en los empresarios cubanos la mejor oportunidad para impulsar el crecimiento económico de Cuba y frenar la emigración de sus habitantes.
Un funcionario del Departamento de Estado explicó a Bloomberg que la política de Estados Unidos busca respaldar al pueblo cubano mientras restringe cualquier beneficio del régimen cubano y de sus militares.
Ricardo Herrero, director ejecutivo del Grupo de Estudio sobre Cuba, detalló que estas medidas permitirán a los empresarios cubanos abrir cuentas bancarias en Estados Unidos y acceder a ellas desde dentro de Cuba.
La controversia en torno a la decisión de Bank of America de aceptar dinero de dueños de Mipymes cubanos refleja la complejidad de las relaciones económicas y políticas entre Estados Unidos y Cuba. Algunos ven esta medida como una oportunidad para apoyar a los empresarios cubanos y, en última instancia, al pueblo cubano, mientras que otros la consideran una colaboración indirecta con el régimen cubano.
Es importante destacar que esta situación plantea interrogantes sobre la responsabilidad de las instituciones financieras en la gestión de sus clientes y cómo equilibran los intereses comerciales con las consideraciones políticas y éticas. La decisión de Antonio Oscar Pino Urrutia de cerrar su cuenta en Bank of America es un ejemplo de cómo las acciones de una entidad financiera pueden generar reacciones enérgicas por parte de sus clientes cuando se percibe un conflicto de intereses.
