El Divo de Placetas no se deja pisotear por nadie, y mucho menos cuando se trata de burlas de mal gusto. Eduardo Antonio, uno de los rostros más queridos —y también más polémicos— de la farándula cubana, volvió a encender las redes al responder con elegancia y carácter a una seguidora que se pasó tres pueblos con su comentario.
La cosa fue así: tras publicar una foto en la que se le notaba su más reciente retoque estético, una usuaria le lanzó tremendo dardo venenoso: “Ahora te falta hacerte la cirugía del culo para que te reduzcan los pliegues”. Una falta de respeto en toda regla.
Pero Eduardo, que no se anda con chiquitas, respondió con dignidad, sin bajar al mismo nivel, dejando claro que ese tipo de mensajes no solo le faltan el respeto a él, sino también a muchas mujeres cubanas, incluidas su madre y otras figuras que han luchado con su imagen. Y soltó una frase que se volvió eco en toda la red: “Yo soy un artista cubano que ha puesto el nombre de Cuba muy alto, le guste a usted o no”.
El mensaje lo acompañó con un título que lo dijo todo: “LA GROSERÍA EN SU MÁXIMA EXPRESIÓN”. Y como era de esperar, la publicación se volvió viral. Los comentarios de apoyo no se hicieron esperar: desde “Te aplaudo de pie” hasta “Qué bien puesto tienes el carácter”, sus seguidores se lanzaron a respaldarlo con fuerza.
Este episodio llega justo después de que Eduardo revelara que se había hecho una cirugía facial en Miami, para ajustar un poco las marcas que dejó su pérdida de peso. Con ese tono suyo tan desenfadado, explicó: “Fue para levantar lo que se cayó”, como quien habla de colgar un cuadro torcido.
Aunque no es la primera vez que le caen arriba por sus retoques, Eduardo no se esconde ni pide permiso. Hace poco respondió a otros críticos con una pregunta bien directa: “¿Y acaso alguien me va a pagar la cirugía?”, dejando claro que su cuerpo es suyo y hace con él lo que le dé la gana.
¿Y el resultado? Ya compartió una imagen donde se le ve junto a su esposo, mirando al espejo, con el rostro firme, rejuvenecido y una mirada que dice: “aquí estoy yo”. Sus fans lo tienen claro: quedó espectacular. El Divo no solo se retoca el rostro, también le pasa bisturí a los prejuicios, y lo hace sin perder ni un segundo el brillo que lo caracteriza.