¡Ay, mi madre! El galán cubano más querido del mundo de las telenovelas está en el ojo del huracán. William Levy se declaró inocente de los cargos que enfrenta en Florida, luego de ser arrestado por un altercado en un restaurante. Sí, como lo lees: ¡nuestro William ahora protagoniza un drama, pero en la vida real!
Todo empezó el martes pasado, cuando Levy fue arrestado en el condado de Broward. ¿La razón? Un supuesto escándalo en un restaurante que terminó con la policía involucrada. Este jueves, su abogada se presentó en la corte y, en nombre del actor, declaró que él no se considera culpable de nada de lo que se le acusa.
Y no, William no fue a la corte personalmente. El encargado de representar al galán fue su abogada, Regina Tsombanakis, una veterana en casos mediáticos, que además pidió que el juicio se haga con jurado. O sea, va en serio.
Según los documentos judiciales, hay dos cargos contra Levy: uno por “ebriedad y alteración del orden público”, y otro por “invasión de propiedad privada”. Todo esto por un incidente que ocurrió en el restaurante Baires Grill, en Weston, Florida.
Lo que dice la policía es que William estaba bastante tomado y no quiso hacer caso cuando le dijeron que se fuera del lugar. Y claro, eso terminó con una noche en el calabozo. Pero al día siguiente, pagó $500 de fianza y salió como si nada. De hecho, se le vio sonriente, saludando a los medios y hasta haciendo chistes sobre sus “nuevas amistades” en la cárcel. ¡Un personaje!
La defensa también solicitó a la fiscalía que entregue los nombres de los testigos y cualquier grabación del incidente, incluyendo declaraciones del actor y del amigo que lo acompañaba esa noche. Todo apunta a que hay muchas versiones en juego.
William, por su parte, dice que no empujó a nadie ni se negó a pagar. Según el paparazzo Jordi Martín, en “El Gordo y la Flaca”, Levy explicó que su amigo fue quien discutió con el personal del restaurante porque la cuenta le pareció exagerada. Él solo intentaba calmar los ánimos cuando, de pronto, apareció la policía y se lo llevaron. Dice que hasta piensa que fue víctima de una “trampa”.
Pero hay otra versión circulando. Según una fuente cercana, el problema comenzó cuando William estaba compartiendo tragos con otros padres del colegio de su hijo. Él invitó una ronda, pero cuando trajeron la cuenta, supuestamente no quiso pagarla, lo que encendió la chispa del conflicto.
Incluso hay una grabación del 911 hecha por un empleado del restaurante, donde se dice que tanto William como su acompañante se negaban a pagar, a pesar de que les ofrecieron un descuento, y que estaban discutiendo con otro cliente.
Ahora todo queda en manos de la justicia. En las próximas semanas habrá una audiencia preliminar y, con suerte, sabremos más detalles. Mientras tanto, las redes están que arden y el nombre de William Levy sigue siendo noticia en toda la comunidad latina.