Hay artistas que conectan con su público desde el estudio… y otros que lo hacen en plena calle, sin filtro y con el corazón en la mano. Ese es el caso de Musteerifa, la cantante cubana de música urbana que acaba de vivir un momento mágico junto a sus fans y que, como era de esperarse, se volvió viral.
Todo pasó en una calle cualquiera de Cuba, pero lo que ocurrió ahí no tuvo nada de común. Un grupo de jóvenes reconoció a Musteerifa en medio del bullicio y, sin pensarlo dos veces, comenzaron a cantarle a capela uno de sus temas más pegados: “Las ganas”. La reacción de la artista fue pura emoción.
Ella no se hizo la estrella ni se escondió. Todo lo contrario. Se unió al coro con una sonrisa enorme y el corazón latiendo fuerte, dejando claro que su conexión con el público es 100% real. El momento fue tan potente que la propia Musteerifa no pudo resistirse a compartirlo en su TikTok con un mensaje lleno de gratitud: “Mi gente LOS AMO, gracias a Dios por todo esto que estoy viviendo no me lo creo”.
En el video, que ya circula como pólvora en redes, se puede ver a Musteerifa rodeada de jóvenes emocionados, todos cantando a viva voz. No hay producción, ni luces, ni micrófono. Solo música, emoción y una artista que sabe dónde están sus raíces. El clip ha recibido miles de likes, comentarios y compartidas en cuestión de horas.
Y es que “Las ganas”, su tema en colaboración con el también cubano Payaso por Ley, está arrasando. No solo suena en las calles, también está reventando las plataformas. El videoclip oficial ya superó los 10 millones de vistas en YouTube… ¡en solo dos meses! Un éxito rotundo que confirma que Musteerifa está marcando territorio en la nueva escena urbana cubana.
Este tipo de momentos, tan simples como poderosos, son los que demuestran quiénes son los artistas que realmente tocan el alma del pueblo. Musteerifa no solo tiene talento, también tiene calle, carisma y ese “no sé qué” que hace que miles se identifiquen con ella. El video fue una prueba más de que cuando hay conexión real, la música no necesita escenario.
Lo que pasó ese día no fue un show… fue una celebración. Una de esas que nacen del amor del público y que ningún algoritmo puede predecir. Musteerifa no solo cantó en la calle: se quedó grabada en el corazón de muchos.
