¡Sí, aunque no lo creas! El galán de telenovelas, ídolo de muchas y protagonista de más de un suspiro, William Levy se metió en tremendo lío este lunes 14 de abril en Florida. El actor fue arrestado en la ciudad de Weston, y aunque su sonrisa no faltó en la audiencia, esta vez no estaba actuando.
El cubanoamericano compareció ante la corte este martes, tras haber sido detenido bajo cargos que no suenan nada bien: intoxicación en público, alteración del orden e intrusión en propiedad ocupada. ¡Casi un combo de película, pero sin libreto!
Todo ocurrió en el condado de Broward, cuando agentes del Sheriff local detuvieron a Levy y lo trasladaron a la cárcel principal de Fort Lauderdale. Desde ahí fue presentado ante el juez, esposado y con uniforme de preso, algo que ni sus fans más fieles imaginaron ver.
En el video de la audiencia —que ya está circulando por todos lados— se puede ver al juez aceptar el acuerdo entre la fiscalía y la defensa. Con un tono más tranquilo de lo esperado, le deseó al actor un simple “buena suerte” al final del encuentro.
¿Y cuánto le costó salir? Nada que su cuenta bancaria no pueda manejar: 250 dólares por cada cargo, o sea, 500 dólares en total. Levy quedó en libertad condicional mientras espera la próxima cita con la justicia.
Pero esta no es la primera vez que el nombre de William Levy aparece en la esfera legal. Hace apenas un año, la policía visitó varias veces su casa por presuntos conflictos domésticos durante su separación con Elizabeth Gutiérrez, su pareja de tantos años.
Hasta ahora, ni Levy ni sus representantes han querido hablar públicamente del tema. Los fans están pendientes de alguna declaración, algún comunicado, o aunque sea un post en redes. Pero por el momento, silencio absoluto.
Lo que sí está claro es que esta historia todavía no ha terminado. Si algo sabemos es que en el mundo de las celebridades, cualquier cosa puede pasar… y rápido. ¿Se trató de una noche de copas que se salió de control? ¿O hay algo más detrás del escándalo?
Seguiremos atentos. Porque cuando una estrella cae —aunque sea por un tropezón legal— todos queremos saber qué hay detrás del telón.