La actriz cubana Ana de Armas sigue dejando huella en Hollywood, esta vez al convertirse en la primera mujer en recibir el premio Estrella de Acción del Año en los Big Screen Achievement Awards del CinemaCon. La ceremonia tuvo lugar en el emblemático Coliseo del Caesars Palace, en Las Vegas, y puso los reflectores sobre la artista, que ha sabido ganarse un lugar sólido en la industria cinematográfica estadounidense.
El galardón llega justo cuando el estreno de su nueva película, “Ballerina”, está a la vuelta de la esquina. Se trata de un spin-off del universo John Wick, donde Ana asumirá un rol protagónico cargado de adrenalina. Aunque la fecha de lanzamiento ha sido movida varias veces, el filme ya tiene día confirmado: 6 de junio de 2025. Y con eso, las expectativas están por las nubes.
Pero como casi todo lo que rodea a figuras públicas con raíces cubanas, el reconocimiento no ha estado exento de controversias. En redes sociales, las reacciones han sido mixtas. Muchos aplauden el éxito de la actriz y celebran su ascenso meteórico en la meca del cine, mientras otros cuestionan su vínculo —o la falta del mismo— con la realidad del pueblo cubano.
Uno de los más críticos ha sido el actor cubano Gabriel Wood, hijo del reconocido Patricio Wood. En una publicación de la cuenta Cubaactores que destacaba el logro de Ana, Gabriel no se guardó nada y soltó su opinión sin filtro: “Ella podrá poner en alto muchas cosas, incluso algunas al mismo tiempo, pero el nombre de Cuba jamás”. Según él, representar al país implica compromiso con la libertad y el dolor del pueblo, algo que considera ausente en la postura pública de De Armas.
Cuando otros usuarios salieron en defensa de la actriz, asegurando que sí representa a Cuba en lo más alto, Wood dobló la apuesta. Recalcó que Ana nunca se ha pronunciado sobre la situación en la isla y que su relación con Manuel Anido, hijastro del presidente Miguel Díaz-Canel, hace aún más improbable que lo haga algún día.
“Con la inmensa tribuna que tiene, jamás ha mencionado el dolor y la realidad que vive su pueblo a causa de la tiranía”, expresó el actor, dejando claro que, para él, el silencio también comunica. “Este sería un buen momento para hablar… pero no puede, porque eligió burlarse de su pueblo”, concluyó.