Cuando piensas en juguetes, lo primero que te viene a la mente es la felicidad de un niño, ¿verdad? Pero en Cuba, comprar un simple juguete puede convertirse en una verdadera misión imposible. Así lo mostró en TikTok una cubana residente en Matanzas, que quedó en shock al ver los precios desorbitados de una tienda de juguetes privada.
“¡Me quedé loca con la preciosura de juguetes, pero más loca me quedé con el precio que tenían!”, exclamó Sheyla, conocida en la red social como @sheyreyes03. En su video, que no tardó en hacerse viral, exhibió muñecas, sets tipo Lego y hasta figuras de Stitch con precios que iban desde los 3.500 hasta los 12.000 pesos cubanos.
¿Quién puede pagar estos precios?
Sheyla no podía creer lo que veía. Mientras recorría la tienda, su sobrina Lía miraba fascinada los juguetes, pero la realidad económica era otra: esos precios estaban totalmente fuera de su alcance. “Los juguetes aquí estaban extremadamente caros”, insistió, mostrando muñecas de 6.000 pesos y sets de bloques desde 6.500 hasta 12.000 CUP.
Entre la indignación y la nostalgia, Sheyla recordó su propia infancia: “Yo crecí con unas Barbies que no tenían nada que ver con esto… Jamás en la vida he visto juguetes tan lindos”. Y aunque reconoció que eran hermosos, también dejó claro que para la mayoría de las familias cubanas, estos precios son una burla.
Las redes reaccionan con indignación
El video de Sheyla desató un aluvión de comentarios en TikTok. Muchos cubanos dentro y fuera del país se mostraron indignados, comparando los precios con los de otras partes del mundo.
“Esos juguetes en Estados Unidos cuestan menos de 5 dólares en las tiendas chinas”, comentó un usuario desde Miami. Otros respondieron desde Venezuela y Nicaragua, asegurando que esos mismos juguetes se consiguen entre 4 y 6 dólares. En México, incluso se pueden comprar en oferta a precios mucho más bajos.
Pero más allá de las comparaciones, lo que más dolió fueron los comentarios sobre los niños cubanos. “Debe ser tan triste que tu hijo te pida un juguete y no poder comprárselo”, escribió una madre. Otro usuario propuso convertir los precios a dólares para entender mejor la magnitud del problema, algo que dejó claro que un solo juguete en Cuba puede costar más de lo que gana una persona en un mes.
La crisis no perdona ni a los juguetes
Este video es solo una muestra más de la difícil realidad económica en la isla. No es la primera vez que Sheyla denuncia los elevados precios en Cuba: en marzo, mostró los costos de los libros infantiles en la Feria del Libro de Matanzas, donde unas simples “cuquitas” costaban 1.050 pesos.
Otros videos virales han demostrado lo mismo: la vida en Cuba es cada vez más cara. Un joven llamado Henry intentó vivir con un salario mínimo de 2.100 pesos y apenas pudo comprar lo más básico. “La cruda realidad del salario mínimo”, lo tituló CiberCuba.
El problema es generalizado. Una maestra en licencia de maternidad recibe apenas 8 dólares al mes, mientras que una jubilada mostró que su pensión de 1.500 pesos solo le alcanzó para tres huevos, arroz, frijoles y algo de picadillo.
Según expertos, el costo mensual de alimentación para dos personas en Cuba supera los 24.000 CUP. Entonces, ¿cómo se supone que una familia pueda comprar juguetes?
Sheyla lo resumió en una frase que refleja la dura realidad: “Para un niño normal que vive fuera de Cuba, esto no le sorprende, pero un niño cubano que vea esto se queda frío… y sus padres no pueden comprarlos”.
La pregunta sigue en el aire: ¿Quién puede pagar estos juguetes en Cuba?
