El cantautor cubano Raúl Torres no pudo ocultar su descontento tras una visita al Museo de la Música Cubana, donde descubrió que su nombre y su obra brillaban… pero por su ausencia.
🤔 «Ni una foto, ni un recuerdo, ni una mención»
Torres compartió su experiencia en redes sociales, dejando claro que la omisión de su legado dentro del museo le cayó como un cubo de agua fría. Según relató, hace unas dos semanas visitó la institución junto a unos amigos y quedó impresionado con la calidad de la exposición, la limpieza y la forma en que estaba organizada la historia de la música cubana.
Pero su entusiasmo se esfumó rápido. Al llegar a la sección de la trova, se topó con la sorpresa de que su nombre no aparecía por ningún lado. Ni una foto, ni un reconocimiento, nada. Como si nunca hubiera existido.
Para colmo, contó que las guías del museo ni siquiera lo reconocieron y una de ellas llegó a preguntarle quién era. “Este hecho ha sido un duro revés para mí”, confesó el artista.
🎸 Adiós a la donación de su guitarra
Torres aseguró que no espera disculpas ni correcciones, pero la experiencia lo hizo repensar su relación con la cultura oficialista. De hecho, mencionó que en el pasado había considerado donar al museo la guitarra con la que compuso su canción dedicada a Fidel Castro, pero ahora ha decidido entregársela a su familia.
“Siempre supe que radicalizar mi pensamiento y expresar mis criterios me traería problemas, pero no imaginé que llegarían a este extremo”, escribió en su publicación.
⚖️ ¿Doble rasero en el museo?
Lo que más le molestó fue ver que otros artistas que han criticado al gobierno sí están representados en el museo, mientras que su obra fue ignorada por completo. No obstante, reconoció que estos músicos también tienen méritos artísticos y que, más allá de las posturas políticas, el talento debería ser lo que realmente importe.
Torres ha sido una figura polémica en la música cubana, especialmente por su canción «Cabalgando con Fidel», que generó fuertes críticas tanto dentro como fuera de la Isla por su alto contenido propagandístico. Sin embargo, en los últimos años, su discurso ha mostrado ciertos matices, como cuando en 2024 instó al gobierno cubano a «cambiar todo lo que deba ser cambiado».
En aquel momento, expresó que el pueblo necesitaba una «acción profunda para salvar su proyecto», al tiempo que mostraba preocupación por la creciente desafección de los artistas hacia el sistema. También culpó a las redes sociales de influir en el pensamiento de muchos músicos y de “bombardear con propaganda manipulada”.
