Las autoridades estadounidenses han detenido a un ciudadano cubano que ahora enfrenta un inminente proceso de deportación. Su nombre es Osiel Rodríguez-González y su historial delictivo ha generado indignación en redes sociales. Desde violencia doméstica hasta la venta de drogas, sus antecedentes son preocupantes, pero lo que finalmente lo llevó a prisión fue un acto de crueldad animal que dejó a muchos sin palabras.
El arresto que lo cambió todo
Rodríguez-González, quien se encontraba en situación irregular en Estados Unidos, fue arrestado por la Patrulla Fronteriza en los Cayos de Florida. El jefe del Sector Miami confirmó la noticia a través de la red social X, detallando que el cubano no solo enfrentaba cargos previos, sino que su última acción había sido brutal: golpear y asfixiar a un perro pequeño en plena vía pública.
El incidente ocurrió en abril de 2024 en la ciudad de Maratón, Florida. Testigos relataron que Rodríguez-González, en un arranque de ira, comenzó a insultar a su mascota, luego la golpeó y finalmente intentó estrangularla. El perro, en un desesperado intento por salvarse, logró escapar y se escondió debajo de un automóvil.
El conductor del vehículo, al notar la situación, se detuvo para recoger al asustado animal, pero en ese momento el agresor lo alcanzó y le arrancó violentamente la mascota de las manos.
Un perro que temblaba de miedo
Cuando la policía llegó al lugar, encontró al perro visiblemente tembloroso y escondiéndose de su dueño. Inmediatamente, agentes del condado de Monroe detuvieron a Rodríguez-González y lo trasladaron a la cárcel con una fianza de 75,000 dólares.
Afortunadamente, el animal fue examinado por la Sociedad para la Prevención de la Crueldad contra los Animales y, aunque no sufrió heridas graves, quedó claro que había sido víctima de una agresión aterradora.
De la violencia doméstica a la deportación
Pero este no es el único delito en el historial de Rodríguez-González. Además de la crueldad animal, las autoridades confirmaron que tiene antecedentes por violencia doméstica y tráfico de cocaína. Su historial delictivo ha sido suficiente para que ahora se encuentre bajo custodia federal, esperando su proceso de deportación.
¿Un caso aislado o parte de una tendencia?
El caso de Rodríguez-González ocurre en medio de un aumento en las deportaciones de cubanos bajo la administración de Donald Trump. Recientemente, el arresto de una madre indocumentada en California, quien era la única cuidadora de su hija con cáncer, desató una ola de indignación entre activistas proinmigrantes.
Mientras tanto, las autoridades cubanas han advertido que los migrantes deportados están siendo investigados y, en algunos casos, detenidos por haber salido ilegalmente de la isla o tener antecedentes penales. En este clima de tensión, miles de cubanos en EE.UU. viven con el temor constante de ser los próximos en ser expulsados.