Sandro Castro, nieto del fallecido líder cubano Fidel Castro, ha vuelto a ser tendencia en redes sociales, pero no precisamente por buenas razones. Esta vez, su peculiar manera de “celebrar” el Día Internacional de la Mujer dejó a más de uno con la boca abierta y a otros con el ceño fruncido.
A través de un video en Instagram, Sandro apareció recostado sobre una sábana blanca, rodeado de tres mujeres vestidas de negro con labios rojos y una estética que mezclaba vampirismo y seducción. Con una sonrisa en el rostro y rastros de sangre falsa en los labios y el cuello (donde lucía lo que parecía ser una tanga femenina), el joven pronunció un mensaje que muchos calificaron de “fuera de lugar”.
“Estoy bajo la luz de la luna con tres mutantes que cayeron de la Tierra, que me están dando conectividad para hoy especialmente, internacionalmente, dar mis felicitaciones a las mujeres”, dijo Sandro, antes de soltar una serie de calificativos como “tarántulas, serpientes, lechuzas, ardillas, tóxicas contentas y sádicas”.
¿Homenaje o burla?
Las reacciones no se hicieron esperar. Muchos usuarios criticaron la publicación por ser “frívola” y “desconectada” del verdadero significado del 8 de marzo, una fecha que conmemora la lucha por los derechos de las mujeres y no un escenario para excentricidades.
“Lejos de solidarizarse, refuerza una imagen de ostentación y banalización”, comentó un usuario en redes. Otros simplemente no pudieron evitar preguntarse: “¿En qué estaba pensando?”.
No es la primera vez
Esta no es la primera vez que Sandro Castro genera polémica. En diciembre de 2024, organizó una fiesta de cumpleaños en el exclusivo bar EFE de La Habana, en plena crisis energética que dejaba a miles de cubanos sin electricidad. La celebración, con bebidas de lujo y un código de vestimenta, fue vista como una falta de sensibilidad hacia la realidad del país.
Además, en Nochevieja, publicó un video instando a sus seguidores a “beber como si no hubiera un mañana”, un mensaje que muchos interpretaron como una burla hacia quienes enfrentan escasez y dificultades económicas.
Y por si fuera poco, en San Valentín, Sandro apareció con gafas en forma de corazón, sosteniendo rosas y mostrando el dedo medio, un gesto que muchos tomaron como una provocación hacia sus críticos.
¿Qué hay detrás de sus publicaciones?
Mientras algunos ven en Sandro a un joven que simplemente “vive su vida”, otros lo critican por su desconexión con la realidad cubana. Sus publicaciones, llenas de lujos y excentricidades, contrastan con la vida de la mayoría de los cubanos, que luchan día a día por cubrir sus necesidades básicas.