En medio de la crisis energética que afecta a Cuba, el vocero oficial Humberto López aseguró en su programa «Hacemos Cuba» que el gobierno de Miguel Díaz-Canel está trabajando en inversiones que «van a permitir cambiar este año la realidad» de los constantes apagones. Sin embargo, mientras se esperan esas promesas, el régimen ha lanzado una advertencia contundente: no permitirá que se sigan cometiendo delitos contra el Sistema Electroenergético Nacional (SEN).
Robos que agravan la crisis eléctrica
Según López, entre los delitos más comunes que afectan al sistema eléctrico están el robo de aceite de transformadores, el hurto de equipos como angulares (usados en el mercado negro para construir garajes y cercas), y el desvío de combustible de las plantas eléctricas. Estos actos, que muchas veces involucran a trabajadores de la propia Unión Eléctrica (UNE), son vistos por el Ministerio del Interior (Minint) como una «amenaza significativa» para la infraestructura energética del país.
El robo de aceite de transformadores, por ejemplo, no solo deja sin luz a miles de hogares, sino que también puede causar averías graves e incluso la muerte de quienes cometen el delito. Alfredo López Valdés, director de la UNE, explicó que en zonas rurales aisladas, los transformadores dan servicio a entre 3.000 y 4.000 viviendas, pero al estar desprotegidos, son blanco fácil para los ladrones.
Medidas drásticas contra los delitos
Para combatir estos robos, las autoridades han implementado medidas como soldar las válvulas de los transformadores y instalar cámaras de vigilancia que transmiten imágenes en tiempo real. Sin embargo, los delincuentes han encontrado formas de burlar estas protecciones, rompiendo las válvulas para extraer el aceite.
A pesar de las dificultades, el Minint asegura que ya hay detenidos relacionados con estos delitos. Las investigaciones se basan en pruebas como las herramientas utilizadas para romper las válvulas, que dejan huellas específicas. «Hay que decirle a la gente que se la está jugando», advirtió López Valdés, destacando que estos actos no quedarán impunes.
Advertencias para los compradores
Pero no solo los ladrones están en la mira. La fiscal jefe de Mayabeque, Lourdes Pedroso, alertó que quienes compran el aceite robado para usarlo como combustible en tractores también pueden ser acusados de «receptación», un delito que implica saber que se está adquiriendo un producto ilegal. El aceite de transformador, aunque similar al diésel, tiene un color y olor distintivos, lo que dificulta alegar desconocimiento.
Inversiones en energía solar: ¿Una luz al final del túnel?
Mientras tanto, el gobierno promete avanzar en la instalación de parques solares como parte de la solución a la crisis energética. Según López Valdés, este año se pondrán en servicio más de 50 parques solares en todo el país, cada uno con una inversión de 16 millones de dólares. Estos proyectos buscan que, al menos, el 8% de la electricidad del próximo año provenga de fuentes renovables.
Sin embargo, incluso estos proyectos no están exentos de problemas. Ya se han reportado robos de tornillos específicos para los paneles solares, lo que ha llevado a diseñar sistemas de iluminación, cámaras y garitas de vigilancia para proteger las instalaciones.
