Más de un año después del asesinato del reconocido galerista estadounidense Brent Sikkema, de 75 años, en Brasil, la justicia de Estados Unidos ha dado un giro impactante al caso. Daniel Sikkema, su exesposo de origen cubano, fue arrestado y acusado de contratar a un sicario para cometer el crimen.
El Departamento de Justicia de EE.UU. (DOJ) informó que Daniel, de 54 años y residente en Nueva York, fue detenido y formalmente acusado este martes en el Distrito Sur de ese estado. Las cargas incluyen conspiración para cometer asesinato por encargo, asesinato en un país extranjero y falsificación de pasaporte. Si es declarado culpable, podría enfrentar una cadena perpetua o incluso la pena de muerte.
Un divorcio que terminó en tragedia
Según documentos judiciales, Daniel habría ofrecido dinero a un sicario (identificado como CC-1) para matar a Brent, con quien mantenía un complicado proceso de divorcio. Aunque el DOJ no mencionó el nombre de la víctima, describió a Brent como un ciudadano estadounidense con un patrimonio multimillonario y propiedades en Río de Janeiro, ciudad que visitaba con frecuencia.
Las autoridades señalaron que Daniel utilizó una identidad robada e intermediarios para enviar dinero al sicario, en un intento por ocultar su participación. El crimen se consumó el 14 de enero de 2024, cuando Brent fue asesinado en su apartamento en Río.
La investigación y la defensa de Daniel
El FBI ha liderado la investigación, que está siendo procesada por la abogada Chelsea Schinnour y los fiscales Meredith Foster y Remy Grosbard. Por su parte, Richard Levitt, abogado de Daniel, declaró que su cliente «mantiene su inocencia y espera su completa reivindicación en el juicio», según informó The New York Times.
El asesinato en Río de Janeiro
La noche del 15 de enero de 2024, los bomberos encontraron el cuerpo sin vida de Brent en su lujoso apartamento en el barrio Jardim Botânico de Río. Presentaba múltiples heridas de arma blanca, principalmente en el cuello y el pecho. Tres días después, la policía brasileña arrestó al cubano Alejandro Triana Prevez, de 30 años, como presunto autor material del crimen.
Según las investigaciones, Triana habría viajado desde Sao Paulo a Río para cometer el asesinato, vigilando el domicilio de Brent durante 14 horas antes de actuar. Fue identificado gracias a las cámaras de seguridad del edificio.
La orden de captura internacional
El 10 de febrero, la justicia brasileña emitió una orden de arresto contra Daniel, acusándolo de ser el «autor intelectual y principal interesado en el crimen». La jueza Tula Correa de Mello ordenó que la detención se gestionara a través de Interpol, ya que Daniel se encontraba en Estados Unidos.
Además, se reveló que Daniel habría prometido pagar 200,000 dólares a Triana por el asesinato. Según el Daily Mail, Triana entró al apartamento de Brent con llaves que supuestamente le envió Daniel desde EE.UU. y lo apuñaló 18 veces.
Una vida marcada por el arte y la controversia
Brent y Daniel estuvieron casados durante 15 años y tenían un hijo adolescente. Brent, fundador de la prestigiosa galería Sikkema Jenkins & Co. en Nueva York, era una figura destacada en el mundo del arte contemporáneo. Por su parte, Daniel, nacido en Cuba como Daniel García Carrera, emigró a España y luego a EE.UU., donde trabajó como acompañante masculino antes de conocer a Brent.
Este caso no solo ha sacudido al mundo del arte, sino que también ha expuesto una trama de traición, codicia y violencia que parece sacada de una película. Mientras el juicio avanza, muchos se preguntan cómo una relación que comenzó con promesas de amor terminó en una tragedia tan oscura.
¿Qué sigue en este caso?
Con Daniel Sikkema enfrentando cargos graves y la justicia brasileña buscando su extradición, este caso promete seguir generando titulares. Por ahora, el mundo del arte y la comunidad LGBTQ+ lamentan la pérdida de Brent, un hombre que dejó un legado cultural invaluable, pero cuya vida fue truncada de la manera más trágica.
Como dicen por ahí, «el amor y el odio son dos caras de la misma moneda», y en este caso, esa moneda cayó del lado más oscuro.