La Televisión Nacional cubana ha vuelto a generar controversia tras adelantar fragmentos de un reportaje sobre el supermercado en dólares de 3ra y 70, en Miramar. En el material, se asegura que sus clientes son «la población en general», una afirmación que ha desatado la indignación de muchos cubanos.
El debate sobre la dolarización en la Mesa Redonda
Este miércoles, el programa oficialista Mesa Redonda abordará el tema de la dolarización de la economía cubana, un fenómeno que ha profundizado la brecha entre quienes tienen acceso a divisas y quienes dependen únicamente del peso cubano. Como parte del debate, se presentarán varios reportajes, incluyendo el que intenta justificar el funcionamiento de este supermercado exclusivo.
¿De verdad el pueblo cubano compra allí?
Según la periodista que presenta el reportaje, los clientes del establecimiento tienen opiniones variadas sobre el servicio y, además del turismo, «accede la población en general».
Sin embargo, esta afirmación ignora una realidad evidente: la mayoría de los cubanos reciben su salario en moneda nacional, lo que les impide acceder a estos mercados dolarizados, diseñados principalmente para quienes reciben remesas, tienen negocios privados o son extranjeros residentes en la isla.
Precios inaccesibles y una estrategia de recaudación
Los precios en estos supermercados no solo están en dólares, sino que además son más altos que en otros países, lo que reduce aún más el acceso para la mayoría de los ciudadanos. Paradójicamente, esta barrera de precios también hace que el supuesto atractivo para los turistas sea cuestionable.
Críticas a la estrategia del régimen
El intento del gobierno de normalizar la dolarización ha sido ampliamente criticado por economistas y ciudadanos, quienes ven en esta narrativa oficial un intento de ocultar la crisis económica y la creciente desigualdad entre quienes pueden acceder a divisas y quienes están atrapados en la escasez y la pobreza extrema.
Expectativa ante el programa de este miércoles
Ante la creciente indignación, muchos cubanos están a la espera de ver cómo el régimen justificará esta realidad en la Mesa Redonda. Mientras el gobierno insiste en que estos mercados son accesibles para todos, la crisis económica sigue golpeando con fuerza, dejando a miles de familias sin opciones reales para adquirir productos básicos.