El 26 de febrero, el cuadrilátero de Hialeah, Florida, será testigo del regreso de uno de los grandes del boxeo cubano: Guillermo Rigondeaux. Con 44 años, este excampeón mundial en las divisiones de peso supergallo y gallo está listo para demostrar que aún tiene mucho por ofrecer.
Un maestro de la técnica en acción
Rigondeaux, famoso por su estilo defensivo y su habilidad técnica, continúa siendo una referencia en el mundo del boxeo. Su regreso llega tras un 2024 lleno de logros, destacando su victoria en noviembre contra el dominicano Dannis Agüero, a quien derrotó con un contundente nocaut en el primer asalto. Este triunfo le valió el cinturón Internacional del Consejo Mundial de Boxeo (CMB). La pelea, pactada a 10 asaltos en las 118 libras, fue el plato fuerte de una velada organizada por BoxR Entertainment en el Club E11EVEN de Miami.
Un campeón con raíces en Santiago de Cuba
Oriundo de Santiago de Cuba, Rigondeaux es doble campeón olímpico y considerado uno de los boxeadores más talentosos de su generación. Su viaje hacia el estrellato profesional comenzó en 2009, cuando decidió desertar de Cuba para perseguir su sueño en Estados Unidos. Desde su debut en mayo de ese año, su habilidad técnica y su dominio del ring captaron la atención de los fanáticos y expertos del deporte.
Obstáculos en el camino: Un espíritu de resiliencia
La carrera de Rigondeaux no ha estado exenta de retos. En marzo de 2022, un accidente doméstico casi pone fin a su trayectoria cuando sufrió graves quemaduras en los ojos, poniendo en riesgo su visión. Sin embargo, con una recuperación excepcional y la determinación que lo caracteriza, volvió al ring en febrero de 2023. En esa ocasión, noqueó al colombiano Jesús Martínez en el primer asalto durante una pelea en Hialeah, demostrando que la adversidad no puede detenerlo.
Nuevos horizontes: Del ring al Bare Knuckle
El espíritu competitivo de Rigondeaux lo lleva a explorar nuevas fronteras. En abril de 2024, anunció su intención de debutar en el Bare Knuckle Fighting Championship (BKFC), un formato de boxeo sin guantes que exige una resistencia y fortaleza únicas. Con 43 años, el cubano afirmó que confía plenamente en su capacidad para coronarse campeón también en esta disciplina, reafirmando su pasión y compromiso con el deporte.