El reconocido humorista cubano Ulises Toirac no se guardó nada en su más reciente intervención en redes sociales, emplazando directamente al gobierno cubano a resolver los problemas internos antes de criticar lo que ocurre fuera de la isla. En una publicación en su cuenta de Facebook, Toirac fue claro y directo: «No pienso que haya que mirar pa’ afuera cuando objetivamente y en la concreta hay graves errores dentro». Para él, los problemas económicos, políticos y sociales que enfrenta el país deben ser prioridad antes de exigir respeto o apuntar con el dedo hacia otros.
«Arregla tu casa y luego exige respeto»
El humorista cubano, conocido por su aguda crítica social y política, explicó en su publicación que no basta con criticar a otros países si no se han resuelto los problemas propios. «Arregla tu casa y luego exige respeto del vecindario», subrayó, señalando que las prioridades deben estar bien claras. Toirac cuestionó la capacidad del gobierno para gestionar los problemas internos y advirtió que aún con el «desgaste social y económico», no se ve una respuesta adecuada por parte del gobierno para solucionar la crisis que afecta a la población.
La política económica del gobierno: un fracaso evidente
El actor y comediante cubano no solo criticó la falta de resolución en temas políticos y sociales, sino que también hizo una dura reflexión sobre la política económica implementada por el gobierno cubano en las últimas décadas. Según Toirac, “la política económica del gobierno ha demostrado por años que no resuelve nada” y, peor aún, “genera una imponente desigualdad social”, lo que, a su juicio, ha creado una “deformación catastrófica a nivel individual”.
Para el humorista, las decisiones económicas tomadas por los líderes de la isla han sumido a la población en una espiral de pobreza y desesperanza, mientras las clases más altas, relacionadas al poder, continúan operando con una diferencia de trato que desatiende a las necesidades del pueblo.
La Constitución cubana y la contradicción en la práctica jurídica
Otro punto de crítica en su mensaje fue la propia Constitución cubana, la cual, según Toirac, tuvo que incluir una serie de reformas y leyes solo porque, si se dejaban fuera, estarían violando normas internacionales. Sin embargo, «en la práctica jurídica son violados olímpicamente», sentenció el humorista, aludiendo a la falta de respeto por los derechos fundamentales en Cuba. Toirac ejemplificó esta contradicción con la represión de los manifestantes, donde «puedes ir en silencio y sin carteles y ser acusado de escándalo público o desorden público», algo que, a su juicio, refleja la hipocresía del régimen.
La vuelta a la lista de países patrocinadores del terrorismo: un golpe al pueblo
El regreso de Cuba a la lista de países patrocinadores del terrorismo también fue tema de conversación para el comediante, quien lamentó cómo esta medida afecta principalmente a los ciudadanos, más que al propio gobierno. “Quien no puede hacer negocios online soy yo”, expresó Toirac, refiriéndose a las restricciones que enfrentan los cubanos para acceder a herramientas tecnológicas o recursos en línea. Mientras tanto, el gobierno tiene acceso a estos medios y hasta maneja operaciones fuera de Cuba, un doble rasero que para él es inaceptable.
Además, el humorista agregó que el pueblo cubano es quien realmente sufre las consecuencias de estas sanciones internacionales. «A mí me tratan en muchos aeropuertos como si fuera terrorista», señaló, criticando el trato desigual que reciben los ciudadanos comunes comparado con las autoridades cubanas, que disfrutan de «canales oficiales y protocolos expeditos». Esta situación, según Toirac, «aniquila las posibilidades de vida» de los cubanos, sin que haya un enfoque real en mejorar sus condiciones.
La actitud del gobierno: cegarse ante los problemas internos
Toirac también arremetió contra la actitud del gobierno cubano, acusándolo de hacer caso omiso a los problemas internos mientras justifica sus acciones bajo el “chovinismo” y la “actitud intolerante” de Estados Unidos. Según el humorista, esta estrategia del gobierno tiene como único objetivo «enarbolar el chovinismo» para manipular la opinión pública y justificar el estancamiento de las reformas, mientras el pueblo sigue sufriendo.
Para Toirac, este “estatus quo” no es más que un «pueblo apretao» que busca una válvula de escape en la emigración, y con ello, el gobierno logra perpetuar su poder a través de la migración masiva, pero sin atreverse a enfrentar los verdaderos problemas del país.
El problema cubano: hambre y emigración como única salida
Al final de su reflexión, Ulises Toirac hizo una cruda pero acertada descripción de lo que él considera el «problema cubano»: un pueblo atrapado en la pobreza y la desesperanza. “La aparente solución, encabronar al pueblo haciéndolo pasar hambre pa’ que se levante en armas contra el gobierno, se queda en la primera parte de la tesis. Hambre. Y me voy pa’ no pasarla.»
En sus palabras, Toirac explicó que el gobierno ha fallado en resolver los problemas de fondo, y que la respuesta de muchos cubanos ha sido emigrar, dejando atrás un país que se sigue hundiendo en la crisis. “Más de mil presos ‘por otras causas’ y el 10% de la población echando un pie solo en los últimos dos años”, agregó, haciendo alusión a la ola de emigración que ha afectado la isla en tiempos recientes.
