La Aduana General de la República de Cuba ha anunciado las nuevas tarifas arancelarias para la importación de vehículos y accesorios. Estas disposiciones aplican tanto a personas naturales como a residentes permanentes en el territorio nacional y traen consigo cambios significativos en las políticas de importación.
Restricciones para triciclos eléctricos e híbridos
Entre los puntos destacados, se aclara que la importación de triciclos eléctricos o híbridos por personas naturales, ya sea como pasajeros o mediante envíos, solo podrá realizarse una vez cada cinco años. Esta medida está en línea con la legislación específica vigente, restringiendo la frecuencia de importaciones de este tipo de vehículos.
Esquema de valores y pagos arancelarios
Cada tipo de vehículo tiene un valor asignado en aduana, acompañado de un esquema detallado de pagos que incluye aranceles y servicios diferenciados según el medio de importación. Por ejemplo:
- Sidecar para motocicletas o ciclomotores: Valor en aduana de 100 USD.
- Triciclo eléctrico o híbrido con capacidad adicional: Valor de 550 USD.
- Ciclomotor o motocicleta de combustión interna (hasta 250 cc): Precio base de 850 USD.
- Motocicleta con sidecar incluido: Valor total de 950 USD.
Estas cifras reflejan las tarifas básicas que los importadores deberán considerar, además de otros costos asociados a los servicios aduaneros.
Cambios en las políticas de importación
A inicios de enero, el gobierno cubano implementó una reforma al Decreto-Ley 22 de 2020, introduciendo el pago obligatorio de aranceles en dólares estadounidenses (USD) o en su equivalente en otras monedas libremente convertibles (MLC).
Estos cambios, establecidos en el Decreto-Ley 101 y publicados en la Gaceta Oficial, afectan principalmente las importaciones no comerciales, es decir, aquellas destinadas al consumo personal o uso específico.
Novedades en el cálculo de aranceles
Entre las modificaciones más relevantes se encuentra la introducción de tarifas específicas basadas en la cantidad de productos importados, un enfoque que complementa el cálculo tradicional por porcentaje sobre el valor de los bienes (derecho ad-valorem).
Además, el uso obligatorio de MLC para ciertos productos importados genera costos adicionales para los viajeros, sobre todo aquellos que provienen de países como Estados Unidos, donde el dólar es la moneda predominante.
Impacto en los viajeros y consumidores
Estas medidas buscan mejorar el control sobre las importaciones y garantizar un ingreso sostenido de divisas para el país. Sin embargo, también representan un desafío para los viajeros, quienes deberán afrontar gastos adicionales en dólares o divisas fuertes, incrementando significativamente los costos de importación de productos básicos y vehículos.
Con estas reformas, Cuba continúa ajustando su política económica, adaptándose a las necesidades del comercio internacional y buscando nuevas formas de obtener ingresos en un contexto económico complicado.