a administración del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció este martes la eliminación de Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo; hacer uso de la prerrogativa presidencial para impedir que se pueda tomar acción en tribunales estadounidenses ante demandas judiciales presentadas al amparo del Título III de la ley Helms-Burton y eliminar la lista de entidades cubanas restringidas que designa a un grupo de instituciones con las cuales se prohíbe a ciudadanos e instituciones estadounidenses realizar transacciones financieras, lo que ha tenido efecto en terceros países.
El papel del Vaticano en el acuerdo
Según Martí Noticias, un alto funcionario estadounidense confirmó que esta medida responde a una promesa del régimen de La Habana hecha a la Iglesia Católica. En el acuerdo, el Vaticano tuvo un papel clave como mediador, destacando su influencia en este avance diplomático.
Un giro inesperado en la política estadounidense
En diciembre pasado, Estados Unidos había mantenido a Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo, según su informe de 2023. Sin embargo, la decisión de Biden representa un cambio drástico que llega pocos días antes del potencial regreso de Donald Trump a la Casa Blanca. Este movimiento podría tener un impacto significativo en las relaciones bilaterales.
Eliminación de restricciones financieras
Como parte de este acuerdo, también se eliminará la llamada «lista restringida», que impide ciertas transacciones financieras con entidades cubanas vinculadas a violaciones de derechos humanos. Este alivio podría abrir nuevas oportunidades para la cooperación económica entre ambos países.
