La Central Termoeléctrica (CTE) Carlos Manuel de Céspedes, ubicada en Cienfuegos, enfrenta un periodo crítico. Sus dos unidades principales, la 3 y la 4, están fuera del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) desde diciembre debido a un «mantenimiento intensivo». Según estimaciones, ambas podrían tardar al menos tres meses en generar electricidad nuevamente.
Un impacto significativo en el SEN
Con estas unidades fuera de servicio, el SEN pierde un total de 316 megavatios (MW), una cifra que representa un golpe duro para el sistema energético cubano. José Osvaldo González Rodríguez, director general de la CTE, explicó que los trabajos se centran en la intervención de varios componentes clave de las turbinas.
«Es un trabajo muy complejo que lleva tiempo,» comentó González en declaraciones a Granma. Según el directivo, la Unidad 3, con una potencia nominal de 158 MW, podría estar lista a mediados de abril. Sin embargo, este es solo el comienzo de un proceso que busca mejorar la confiabilidad y eficiencia de las instalaciones.
Problemas más graves en la Unidad 4
Mientras tanto, la Unidad 4 enfrenta desafíos aún mayores. Fallos en el sobrecalentador y el recalentador de la caldera han causado problemas estructurales en las tuberías. González calificó la magnitud de los trabajos como «enorme», destacando que estos problemas requerirán una reparación exhaustiva que podría extenderse hasta junio.
La reparación incluye la sustitución de los intercambiadores y el mantenimiento de equipos auxiliares como los transformadores, generadores y turbinas. Este esfuerzo tiene como objetivo mejorar significativamente las condiciones de la caldera y garantizar la estabilidad de la unidad una vez que se reincorpore al SEN.
Reparaciones clave y cronograma de avances
La desconexión de las unidades en diciembre también incluyó procesos como la limpieza de conductos y la eliminación de sedimentos y mejillones en la Unidad 3, elementos que afectaban el flujo de agua para el enfriamiento. La Unidad 4, por otro lado, requerirá un mantenimiento más profundo en áreas como el economizador y los intercambiadores.
Si todo marcha según lo planeado, la Unidad 3 estará operativa en abril y la Unidad 4 en junio, un alivio necesario para un sistema energético que enfrenta serias limitaciones.
Un panorama complicado para la energía en Cuba
El panorama actual del SEN es preocupante. Además de las dos unidades fuera de servicio en la CTE de Cienfuegos, las unidades 2 y 3 de la CTE Santa Cruz y la unidad 5 de la CTE Renté también están desconectadas, lo que representa una limitación en la generación térmica de 214 MW.
Para este viernes, la Unión Eléctrica prevé una disponibilidad de 2.165 MW frente a una demanda máxima de 2.900 MW, lo que podría provocar afectaciones de hasta 805 MW en el horario pico.
¿Qué sigue para la estabilidad energética?
Con un déficit energético evidente, el gobierno cubano continúa explorando alternativas. Entre ellas, se destaca un posible contrato con Rusia para el suministro de combustible, que podría aliviar, aunque sea parcialmente, la situación.
Mientras tanto, los cubanos enfrentan un día a día marcado por apagones y restricciones, a la espera de soluciones que garanticen un suministro más estable y confiable. La recuperación de estas unidades será clave para aliviar la carga del SEN y reducir las afectaciones a la población.
Este proceso, aunque complejo, podría ser el inicio de una mejoría en el sistema energético cubano. Sin embargo, hasta que las unidades vuelvan a operar, el camino será arduo para la isla.