Una vez más, el gobierno cubano intenta salir del apuro energético, esta vez con la reparación de 38 grupos electrógenos diésel gracias a repuestos provenientes de China. Pero ¿es esto una solución real o solo otro parche para un problema crónico? Aquí te contamos todos los detalles.
Según Arles Luna Leiva, director de generación distribuida de la Unión Eléctrica (UNE), estos equipos deberían estar listos entre enero y febrero, lo que aportaría 53.8 megavatios al sistema eléctrico nacional. Aunque suena alentador, muchos se preguntan si esto será suficiente para enfrentar los apagones constantes que han marcado el día a día de los cubanos.
El envío inicial, recibido a finales de diciembre, incluye motores, radiadores y otros accesorios esenciales para resucitar los generadores averiados. Según el medio oficialista Cubadebate, estos repuestos se están distribuyendo por todo el país, aunque algunas provincias como Ciego de Ávila, Artemisa y Mayabeque tendrán que esperar una segunda entrega porque requieren piezas específicas no incluidas en esta primera ronda.
Este proyecto forma parte de un acuerdo entre el Gobierno cubano y China, cuyo objetivo es recuperar hasta 400 megavatios de generación distribuida. Hua Xin, embajador chino en La Habana, afirmó que el apoyo continuará llegando por aire y mar. Sin embargo, no todos están convencidos de que esto sea suficiente para resolver la crisis energética.
Y es que los problemas van más allá de los repuestos. La generación distribuida en Cuba, que opera con diésel, tiene una disponibilidad actual de solo el 36%. ¿La razón? Falta de mantenimiento, líneas de crédito inestables y sobreexplotación de los equipos. Aunque estos generadores están diseñados para funcionar un máximo de 4 horas al día, en muchos casos han trabajado las 24 horas seguidas para suplir el déficit energético.
Por si fuera poco, los apagones no han dado tregua. Tras una ligera mejora en diciembre, el déficit volvió a dispararse esta semana, afectando a más de 1,100 MW de capacidad. Esto deja claro que la crisis está lejos de resolverse.
El gobierno también ha anunciado un plan para incorporar energías renovables en los próximos años, con la esperanza de agregar 1,200 MW al sistema eléctrico para 2025, principalmente a través de parques solares. Pero la pregunta sigue siendo: ¿podrá Cuba aguantar hasta entonces?