En el corazón de La Habana, el centro comercial Marealta Bulevar ha abierto sus puertas, marcando un hito como el primer espacio de compras exclusivas en la Isla. Aquí, los precios en dólares y los productos de lujo contrastan de manera evidente con la realidad de las tradicionales tiendas estatales. La influencer cubana Calislandia documentó su visita al lugar, que anteriormente funcionaba como un centro de negocios.
Una experiencia de compras a otro nivel
Ubicado en la intersección de 3ra y 5ta Avenida, Marealta Bulevar combina tiendas en funcionamiento con otras que aún están por abrir. En todas, los productos de marcas internacionales brillan, pero sus precios están fuera del alcance del cubano promedio. Por ejemplo, en la tienda Tropical se pueden encontrar sandalias de la marca Picadilly por 52 dólares y zapatos para hombre que alcanzan los 63 dólares. La perfumería del lugar, por su parte, ofrece artículos que superan los 100 dólares, dejando claro que este espacio está diseñado para quienes tienen acceso a divisas extranjeras o tarjetas internacionales.
De bolsos a computadoras: Una oferta variada pero costosa
Entre las tiendas destacadas están Marc Beatrice, con calzado anatómico, Carpisa, que ofrece bolsos y maletas, y Giorgio VIP, próxima a abrir sus puertas. Además, hay locales especializados en maquillaje, electrónica y computación, aunque los precios de estos productos también son elevados. Este centro comercial se posiciona como un espacio que celebra el lujo en una ciudad donde la mayoría lucha por cubrir necesidades básicas.
Grabaciones restringidas: Un reflejo del control
Durante su recorrido, Calislandia enfrentó restricciones para grabar en varias tiendas. A pesar de las advertencias del personal, continuó documentando su experiencia, mencionando que otros creadores de contenido han hecho videos similares sin problemas. Esta falta de uniformidad en las reglas refleja el intento de controlar la imagen de este centro comercial exclusivo.
Un símbolo de desigualdad
La existencia de Marealta Bulevar pone en evidencia las crecientes desigualdades sociales en Cuba. Mientras gran parte de la población se enfrenta a una lucha diaria por obtener alimentos, medicinas y otros productos básicos, este centro comercial representa una burbuja de consumo reservada para una minoría con acceso a divisas extranjeras o remesas del exterior.
Una estrategia para captar divisas
La apertura de Marealta Bulevar se enmarca en la estrategia del régimen cubano de captar divisas mediante la creación de tiendas exclusivas que operan en dólares estadounidenses (USD). Un ejemplo reciente es el supermercado inaugurado en 3ra y 70, en los bajos del hotel Gran Muthu Habana. Este establecimiento, administrado por la Corporación CIMEX S.A., controlada por el conglomerado militar GAESA, únicamente acepta pagos en efectivo en USD o mediante tarjetas internacionales como Visa y Mastercard. Curiosamente, las tarjetas en Moneda Libremente Convertible (MLC), antes promovidas por el gobierno, no son aceptadas.
Marealta Bulevar no solo redefine el concepto de lujo en La Habana, sino que también genera un profundo debate sobre las desigualdades económicas en un país donde el acceso a productos básicos sigue siendo un desafío para la mayoría.