¡Asere, La Habana tiene un nuevo supermercado en 3ra y 70 que solo acepta dólares en efectivo o tarjetas Visa y Mastercard!
Este mercado, ubicado en el edificio del Hotel Gran Muthu Habana, es propiedad de GAESA y está frente al antiguo Mercado de 3ra y 70, que actualmente vende productos en Moneda Libremente Convertible (MLC) pero está desabastecido.
El supermercado está bien abastecido con productos nacionales y extranjeros, desde embutidos, carnes, jugos, aceites y confituras, hasta electrodomésticos. Sin embargo, los precios son inalcanzables para la mayoría de los residentes en la isla.
Esta apertura refleja el avance de la dolarización en Cuba, en un contexto donde el régimen busca captar divisas estadounidenses. El valor real de los salarios que paga el estado decrece en la misma medida que la sobrevaloración de las divisas eleva la inflación.
El peso cubano sigue perdiendo su valor a pasos agigantados, acelerando su caída tras la bancarización anunciada por el régimen. Con esta nueva caída de la moneda nacional, el salario mínimo decretado por el “ordenamiento económico” se queda en $8,75 dólares al mes.
En este contexto, la apertura de un supermercado que solo acepta dólares en efectivo o tarjetas internacionales parece una contradicción. La mayoría de los cubanos no tienen acceso a dólares, y sus salarios en pesos cubanos no les permiten comprar en estas tiendas. Además, el dólar no es la moneda oficial de Cuba, ni en la que se pagan los salarios a la población.
Esta situación ha generado críticas y debates en las redes sociales.
El humorista cubano Ulises Toirac expresó su indignación por la exclusión económica que representa este supermercado para la mayoría de los cubanos. «El famoso bloqueo es relativo. Hay dineros pa los que sí y hay dineros pa los que no», escribió en Facebook, cuestionando la justificación oficial de la crisis de suministros.
Además, criticó la idea de que el nuevo supermercado de La Habana esté dirigido a viajeros. «Pensar que un turista viene a Cuba a comprar jabón, arroz o juguetes es de lo más ‘simpático’ que yo pueda escuchar», afirmó.
La tienda en dólares refleja un modelo de exclusión económica. Solo quienes tienen acceso a divisas pueden adquirir productos allí, exacerbando las desigualdades sociales en la isla. Toirac subrayó esta realidad al decir que «la brecha entre los desposeídos y los que tienen poder sigue incrementándose. Estos no son los sueños de aquellos muchachos que se murieron por un ideal».
La dolarización en Cuba plantea un futuro incierto.
Toirac alertó que las políticas del gobierno tendrán consecuencias inevitables: «La familia que envía dinero vía MLC dejará de hacerlo. Díganle adiós a eso porque además no le resuelve nada al que vive aquí. Los que mucho puedan, enviarán dólares cash. Aumentará el tráfico de divisas», dijo.
El humorista concluyó con una reflexión contundente: «Cada vez esto se me parece menos a los sueños de Martí o de cualquier otro. Actuar en sus nombres con esta realidad es negarles la pureza y el sacrificio por un mejor país».
Con el surgimiento de mercados exclusivos en dólares y la falta de acceso a productos básicos para la mayoría de los cubanos, las críticas como las de Toirac se convierten en un reflejo del descontento social creciente en la isla.
