Con más de 15 años sin un mantenimiento técnico capital, la termoeléctrica Antonio Guiteras, en Matanzas, sigue siendo un tema candente en el panorama energético cubano. Este bloque unitario, el más grande de generación eléctrica en la Isla, ha sido protagonista de frecuentes averías que incluso llevaron al colapso del sistema eléctrico nacional en dos ocasiones durante 2024.
Planes a futuro y cifras actuales
De acuerdo con declaraciones del ingeniero Román Pérez Castañeda, subdirector técnico de la planta, el mantenimiento capital está proyectado para fines de 2025. Según Pérez, se avanza en los preparativos necesarios, incluyendo financiamiento, con el objetivo de llevar a la Guiteras a una generación superior a los 280 MW.
A pesar de su estado crítico, la planta cerró 2024 con cifras destacables: más de 1.800.000 MW generados, el tercer mayor registro desde que comenzó a operar con petróleo cubano en 2002. Además, estuvo en línea 323 días y acumuló más de 7.700 horas de operación, con un consumo específico de 238 gramos de combustible por kilovatio-hora.
Una maquinaria que supera su vida útil
Aunque las estadísticas son motivo de celebración para las autoridades, no pueden ocultar la realidad: la termoeléctrica Guiteras tiene 37 años de explotación y ha superado con creces su vida útil. Las reparaciones y mantenimientos realizados hasta la fecha han sido insuficientes para garantizar un funcionamiento estable.
El mantenimiento capital, proyectado para durar al menos 180 días, implicaría sacar de servicio el principal bloque generador de Cuba, una decisión que podría agravar aún más la crisis energética del país.
Averías recurrentes y promesas incumplidas
Durante 2024, la Guiteras enfrentó múltiples interrupciones. En noviembre, fue detenida para un mantenimiento «inaplazable», lo que desató un récord de apagones en la isla. En junio, una avería en su caldera la dejó fuera de servicio, mientras que en mayo, una fuga de aceite ocasionó otra paralización. Incluso en abril, tras un mantenimiento general en marzo, volvió a averiarse, alimentando la desesperación de los cubanos ante los interminables apagones.
Por si fuera poco, el tanque de combustible que alimenta la planta sufrió un incendio a mediados de junio, complicando aún más la situación.
La realidad detrás de las promesas
La estatal Unión Eléctrica (UNE) y el Ministerio de Energía y Minas habían prometido que los mantenimientos realizados a la Guiteras y otras plantas como Felton en 2023 mejorarían el servicio eléctrico durante los meses de mayor demanda. Sin embargo, los apagones continuaron, dejando a los cubanos en la misma incertidumbre de siempre.
El especialista Jorge Piñón, de la Universidad de Texas, explicó que la capacidad instalada originalmente en la Guiteras era de 317 MW, pero las condiciones actuales limitan su generación real a menos de 290 MW. Piñón fue contundente al señalar que las plantas cubanas han superado su ciclo de vida útil, y que «no hay solución de parches a corto plazo». Según él, la única salida es una recapitalización total del sistema, algo que requeriría entre tres y cinco años, además de cinco a ocho mil millones de dólares.
Un historial marcado por tragedias
En febrero de 2023, un derrumbe en la chimenea de la planta durante reparaciones dejó un saldo trágico: dos obreros fallecidos y otros dos heridos. Este incidente subrayó el grave deterioro de la infraestructura y la urgencia de un mantenimiento capital que sigue postergándose.