El emblemático Café del Oriente, situado en la icónica Plaza San Francisco de Asís y operado por CIMEX, ha encendido las redes sociales con la promoción de una extravagante cena de Fin de Año. El costo: 15,000 pesos cubanos por persona. Sí, leíste bien, ¡15,000! En un país que atraviesa una de las crisis económicas más severas en décadas, esta oferta ha generado opiniones encontradas.
¿Un Fin de Año «distinto»?
La página de Facebook “Restaurantes Centro Histórico” presentó la propuesta como una manera de “pasar un fin de año distinto”, aunque la ironía no pasó desapercibida para muchos. Mientras una parte considerable de los cubanos enfrenta dificultades para garantizar lo básico, la invitación a esta lujosa cena contrasta con la realidad cotidiana de la mayoría.
Un menú digno de lujo
La oferta promete una noche cargada de sabores y exclusividad. La experiencia comienza con un cóctel de bienvenida, destacándose el clásico Cuba Libre, seguido por una selección de panes y patés elaborados por la casa. Los aperitivos incluyen tapas cubanas y una crema de viandas, un toque tradicional en un contexto de lujo.
El plato fuerte ofrece varias opciones que podrían rivalizar con cualquier restaurante gourmet del mundo: solomillo de res con salsa de champiñón y langosta, lonjas de cerdo asado, o un filete de pescado grillé, acompañados de arroz moro y vianda hervida con mojo. La cena culmina con un trío de postres—brownie, cheesecake y Dobosh—y un brindis con cava, acompañado de una cesta de turrones, confituras y manzanas.
Barra abierta y opciones «económicas»
La propuesta también incluye una barra abierta con cervezas, rones cubanos, vinos y refrescos. Y para quienes no puedan costear los 15,000 pesos, el restaurante ofrece una versión “más económica” de la cena por 10,000 pesos, aunque con restricciones en las bebidas.
Decoraciones navideñas y controversias culturales
Las imágenes publicadas en redes sociales muestran decoraciones navideñas, incluyendo un árbol y la figura de Santa Claus. Esto resulta interesante si consideramos las recientes declaraciones del exministro de Cultura, Abel Prieto, quien criticó la presencia de estas figuras, acusándolas de borrar tradiciones cubanas. La contradicción entre las palabras y las acciones de instituciones estatales no ha pasado desapercibida.
Iniciativas solidarias: otro lado de la moneda
Mientras tanto, lejos del lujo, algunos ciudadanos y pequeños negocios han optado por gestos solidarios para este fin de año. El Bar K5 en Guanabo, La Habana, destaca con una iniciativa conmovedora: ofrecerá una cena especial para niños y ancianos vulnerables, mostrando que la empatía puede brillar incluso en los momentos más difíciles.