El cierre de 2024 trae consigo una triste noticia para el deporte en Cuba: la pérdida del medallista olímpico Carlos Alberto Pedroso. A sus 57 años, el espadista falleció en un trágico accidente doméstico ocurrido en Cienfuegos, dejando un legado imborrable en la esgrima cubana y mundial.
Un accidente que enluta al deporte cubano
Según informó el periodista Raúl Rodríguez a través de sus redes sociales, Pedroso sufrió graves quemaduras en un accidente doméstico, aunque los detalles del suceso no han sido revelados. No se ha confirmado si el incidente ocurrió durante los preparativos de la Nochebuena, ni si Pedroso fue sometido a alguna intervención quirúrgica.
Una carrera de éxitos y medallas
Carlos Alberto Pedroso alcanzó la gloria en los Juegos Olímpicos de Sídney 2000, donde, junto a Nelson Loyola e Iván Trebejo, obtuvo el bronce en la competición por equipos. Su actuación incluyó una victoria inicial contra Alemania, una semifinal disputada contra Francia —que finalmente se llevó la plata— y un histórico triunfo sobre Corea del Sur para asegurar el tercer lugar. En la prueba individual, finalizó en el puesto 31.
Un legado en competencias internacionales
Pedroso también brilló en los Juegos Panamericanos de Indianápolis 1987, donde se coronó campeón individual y lideró al equipo cubano hacia el oro. En esa ocasión, compartió pódium con su compatriota Nelson Loyola (plata) y el canadiense Jean Chouinard, destacándose como una de las figuras más prominentes de la esgrima en el continente.
En el ámbito mundial, el espadista sumó cuatro medallas en campeonatos mundiales. Entre sus logros destacan el oro por equipos en Ciudad del Cabo (1997) y bronces en Denver (1989) y Seúl (1999). En la modalidad individual, obtuvo un bronce en el Campeonato Mundial de La Chaux-de-Fonds, Suiza, en 1998.
Un referente para la esgrima cubana
El talento de Pedroso quedó patente desde sus primeras competencias internacionales. En los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1986, realizados en Santiago de los Caballeros, obtuvo el oro por equipos. Además, destacó en la Universiada de Zagreb 1987 con bronces individual y por equipos, y consiguió el oro individual en la Universiada de Duisburgo 1989.