La crisis del transporte en Cuba alcanza su punto más crítico en las terminales de ómnibus, justo cuando las festividades de Navidad y Año Nuevo llevan a miles de personas a intentar viajar. Las largas filas, la falta de vehículos y la desesperación de los pasajeros son el reflejo de una situación que parece no tener solución inmediata.
El caos en la Terminal de Ómnibus de Cienfuegos
Uno de los puntos más afectados es la Terminal de Ómnibus Nacionales de Cienfuegos, según reportó la página de Facebook Rodando por Cuba. La terminal está abarrotada de personas, tanto aquellas con reservas confirmadas como las que esperan en lista, pero los ómnibus no llegan.
Para la popular ruta hacia La Habana, de los cuatro turnos programados, solo uno logró salir a las 6:00 a.m., dejando a cientos de viajeros varados y sin respuesta clara sobre cuándo podrán continuar su camino.
Una noche de frustración para los viajeros
Según otra denuncia publicada por la página La Tijera, la víspera de Navidad fue especialmente difícil en esta terminal. A las 4:30 a.m., un trabajador informó que el ómnibus hacia Santa Clara, programado para las 5:00 a.m., estaba en el taller, sin combustible y sin certeza de poder salir.
Además, el servicio correspondiente al día anterior sufrió un retraso de más de nueve horas, saliendo finalmente a las 2:00 p.m. La incertidumbre no terminó ahí: los pasajeros con destino a Manzanillo y Camagüey enfrentaron retrasos similares, sin ninguna garantía de que sus viajes se realizarían.
Indignación en las redes sociales
Las redes sociales se han convertido en un espacio para que los ciudadanos expresen su frustración. En un mensaje dirigido al ministro de Transporte, Eduardo Rodríguez Dávila, un usuario ironizó sobre la falta de combustible y transporte: “¿Ahora no hay combustible ni transporte? Llégate a Villa Nueva con los ómnibus de la marcha combatiente”.
Este tipo de comentarios reflejan el descontento generalizado. Muchos critican que mientras se priorizan recursos para eventos propagandísticos, como la “marcha del pueblo combatiente” convocada recientemente por el gobernante Miguel Díaz-Canel, las necesidades básicas de transporte de los ciudadanos quedan desatendidas.
La crisis se intensifica en temporada festiva
El colapso del transporte en Cuba no es un problema nuevo, pero se agrava en fechas festivas. A la falta de ómnibus se suma el alto costo del transporte privado, que deja a muchos cubanos sin opciones asequibles para movilizarse.
Esta crisis, que afecta tanto la movilidad como el ánimo de las personas, se entrelaza con la escasez de alimentos y productos básicos, haciendo que las celebraciones de fin de año sean más un recordatorio de las dificultades diarias que un momento de alegría.