Marielys Pérez, una madre cubana originaria de Pinar del Río, se ha visto obligada a tomar una decisión extrema para poder afrontar los elevados costos médicos que enfrenta su hija, Ahittana, quien padece de una grave forma de epilepsia conocida como encefalopatía epiléptica de Lennox-Gastaut. En una publicación que tocó los corazones de muchos, Marielys decidió cortarse el cabello y venderlo a través de sus redes sociales como una forma de generar los fondos necesarios para cubrir los tratamientos y cuidados de su hija.
«A mis amigos que les interese comprar pelo, aquí tengo el mío. Necesito venderlo, hoy tuve que tomar esa decisión», compartió Marielys en su cuenta de Facebook, con una transparencia que ha conmovido a miles. La necesidad de esta madre es urgente, ya que su hija lleva más de un año hospitalizada, enfrentando los altísimos costos de la atención médica.
La vida entre tratamientos y esperanzas
En sus publicaciones, Marielys no solo habla de los gastos médicos, sino también de las emociones que acompaña su lucha diaria. “Un año y un mes en un hospital son muchísimos gastos, y los primeros son las necesidades de mi niña, que son muy caras. Por favor, ayúdenme a venderlo», expresó, pidiendo apoyo para conseguir los recursos que le permitan seguir adelante.
A pesar de las adversidades, la madre de Ahittana no pierde la esperanza y, a través de sus palabras, transmite una fuerza imparable. En un post anterior, expresó su amor profundo por su hija: «Princesita mía, hoy una vez más le doy gracias a Dios por tenerte a mi lado, eres toda una guerrera de mil batallas, has superado muchas pruebas y obstáculos, y a todas ellas de la mano de nuestro Dios».
Este testimonio de lucha refleja la resiliencia de una madre que ve en su hija una fuerza indomable para seguir superando las dificultades de la vida. Aunque la pequeña está recibiendo tratamiento continuo, Marielys sigue soñando con un futuro mejor para ella y su familia.
Un camino lleno de fe y esperanza
Desde el hospital, la madre de Ahittana expresa cómo la fe se ha convertido en un pilar fundamental en su vida. «Hoy te disfruto al máximo; desde que naciste hace 2 años te tengo como mi más preciado diamante», escribió, haciendo referencia a cómo ha aprendido a valorar cada momento con su hija. En la misma publicación, agradeció a todas aquellas personas que, de alguna manera, han sido un apoyo constante para ella y su familia en este difícil viaje.
La historia de Marielys Pérez también es un reflejo de la importancia de la solidaridad en momentos de crisis. «Existen unos ángeles enviados por nuestro Dios con un corazón gigantesco lleno de amor, que han cambiado mucho tu vida y te traen muchas bendiciones», expresó agradecida por quienes han ayudado a su hija en momentos críticos.
El sueño de un futuro mejor
A pesar de las dificultades, Marielys no pierde la fe. Su mayor sueño es salir del hospital y darle a su hija una vida mejor. En varias publicaciones, ha compartido cómo le habla al oído a su pequeña, prometiéndole que nunca perderán la esperanza. “Siempre te hablo al oído y te digo que no vamos a perder la fe de salir del hospital. Verás que un día nos van a dar esa gran sorpresa… esa bendición de Dios para mi hija enferma del Lennox-Gastaut. Mucha sanidad para ti, mi niña, en el nombre de Jesús. Amén”.
Este acto de fe y determinación ha tocado los corazones de quienes siguen de cerca su historia en las redes sociales. Muchos se han emocionado al leer sobre el amor incondicional de una madre, que, a pesar de la adversidad, se mantiene firme en su lucha por el bienestar de su hija.
