Un grupo de diez cubanos que intentaron llegar a las costas de Florida en una embarcación improvisada enfrentan ahora un proceso de deportación tras ser interceptados por las autoridades estadounidenses. El incidente ocurrió recientemente y subraya una vez más los peligros de la migración irregular desde la isla.
Según un comunicado oficial de Jeffrey Dinise, Jefe de la Patrulla Fronteriza en el sector de Miami, el grupo fue hallado en Smathers Beach, tras lo cual se inició el procedimiento de deportación. Dinise detalló que, junto con otras agencias asociadas, se llevó a cabo una intervención rápida que permitió interceptar a los migrantes. En su cuenta de X (anteriormente Twitter), el funcionario explicó: “Los migrantes serán procesados para procedimientos de deportación”.
Este incidente forma parte de un aumento en la migración marítima cubana hacia Estados Unidos, que ha sido constante en los últimos años. En 2024, al menos 142 cubanos han perdido la vida en el mar mientras intentaban alcanzar las costas de Estados Unidos, según la Organización Internacional para las Migraciones. Estos trágicos sucesos reflejan el alto riesgo que los migrantes están dispuestos a asumir en busca de mejores oportunidades.
A pesar de las políticas restrictivas y las advertencias sobre los peligros de la travesía, los cubanos siguen emprendiendo viajes peligrosos por mar. La Patrulla Fronteriza y la Guardia Costera de EE. UU. han intensificado sus operaciones de interceptación y repatriación, enviando de vuelta a más de 1,300 migrantes cubanos desde diversos puntos de la región este año.
Ante este panorama, las autoridades siguen haciendo llamados para que los migrantes usen vías legales de inmigración, ya que el riesgo de morir o ser detenidos por inmigración se incrementa con cada intento en una embarcación precaria.
