La Unión Eléctrica (UNE) de Cuba ha anunciado que este jueves, durante el horario pico de la tarde y noche, el 53% del territorio nacional experimentará cortes eléctricos simultáneamente. Este es uno de los déficits energéticos más graves del año, lo que vuelve a poner en evidencia la fragilidad del sistema energético del país.
Averías y falta de combustible: Las causas detrás de la crisis
Según la UNE, los apagones tienen su origen en dos problemas principales: la falta de combustible y las averías en las centrales termoeléctricas que actualmente están operativas. En específico, se encuentran fuera de servicio, por problemas técnicos, la unidad 2 de la Central Termoeléctrica (CTE) Felton y la unidad 6 de la CTE Renté. Además, varias unidades de otras plantas, como las de Mariel, Santa Cruz, Cienfuegos y Nuevitas, están en mantenimiento.
Pero la situación no termina ahí. La falta de combustible también ha paralizado 69 centrales de generación distribuida, 11 motores de la patana de Melones y la patana de Regla, lo que agrava aún más el panorama energético.
Un déficit energético crítico
Para este jueves, la UNE estima que la capacidad máxima de generación eléctrica será de apenas 1.559 MW, mientras que la demanda alcanzará los 3.200 MW. Esto deja un déficit de 1.641 MW, aunque se prevé que la afectación real alcance los 1.711 MW durante el horario pico. Este desbalance pone en evidencia la incapacidad del sistema para cubrir las necesidades básicas del país.
Regreso a los apagones prolongados
Desde el apagón total del pasado 18 de octubre, varias provincias han vuelto a experimentar lo que parecía ser una pesadilla superada: solo tres horas de electricidad al día. Aunque La Habana y algunas cabeceras provinciales han sido parcialmente excluidas de esta situación debido a su vinculación con servicios esenciales, gran parte de la población enfrenta cortes eléctricos constantes que afectan gravemente su calidad de vida.
El sistema energético, en caída libre
La situación no es nueva. En septiembre, la afectación eléctrica alcanzó un 43%, y en febrero de este año llegó al 45%. Sin embargo, octubre marcó un punto crítico con apagones que afectaron a la mitad del país y la desconexión total del Sistema Electroenergético Nacional (SEN).
Promesas incumplidas y protestas en aumento
En mayo, el gobernante cubano Miguel Díaz-Canel anunció que se realizarían “mantenimientos prolongados” hasta junio para reducir los apagones durante los meses de mayor consumo, como julio y agosto. En su pódcast Desde la Presidencia, Díaz-Canel declaró: “No podemos comprometernos a que no haya apagones. Debido a las condiciones actuales del sistema, ese compromiso no es posible ahora”.
Sin embargo, esta estrategia no logró evitar que los cortes eléctricos continuaran afectando a la población, incrementando el descontento social. Los apagones, además de complicar la ya crítica situación económica, han sido un detonante de protestas. Las más notorias ocurrieron el 11 de julio de 2021, las mayores en décadas, y más recientemente el pasado 17 de marzo en Santiago de Cuba y otras localidades.
