La situación en Cuba parece no dejar de sorprendernos. Esta vez, la alarmante noticia proviene de una iglesia cristiana de La Habana, donde, en una extraña y preocupante alianza con el régimen, una capitana de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) impartió una lección sobre la vida militar a niños. Lo que parecía ser un espacio de fe y espiritualidad, se transformó en un terreno para el adoctrinamiento ideológico.
El evento fue organizado por el Movimiento Espiritual de Restauración, una iglesia cristiana local que, según reportes del periodista Yosmany Mayeta, permitió que la capitana Jeibys Sandoval de las FAR hablara con los niños sobre temas militares. En un post publicado en Facebook, la iglesia destacó que los pequeños participaron en actividades centradas en aspectos militares como marchas, pasos de soldados y la función de las FAR en Cuba. Las preguntas formuladas a los niños tenían un claro propósito de normalizar la vida castrense, tales como: «¿Cómo optamos por una carrera militar?» y «¿Cómo es la vida de un militar?»
Lo más inquietante de todo esto es que los responsables de este adoctrinamiento no lo esconden. En su publicación, el Movimiento Espiritual de Restauración agradeció a los padres por confiar en ellos y se despidieron con un mensaje que no deja lugar a dudas sobre sus intenciones: «Sembramos en el presente para cosechar en el futuro». Este es el tipo de frase que deja claro que, más allá de una simple lección sobre disciplina, hay un intento de moldear las mentes jóvenes para que se alineen con la ideología del régimen cubano.
El adoctrinamiento político no es nuevo en Cuba. A lo largo de más de seis décadas, el gobierno ha utilizado todos los recursos a su alcance para formar a los niños en el pensamiento oficialista. Desde las escuelas hasta los medios de comunicación, el régimen se asegura de que desde una edad temprana los ciudadanos acepten su visión del mundo. Sin embargo, la utilización de una iglesia como espacio para este tipo de actividades es un nivel completamente nuevo de complicidad. Una iglesia, que debería ser un refugio de paz y espiritualidad, se convierte en un aliado de un régimen que ha perseguido y reprimido las creencias religiosas durante décadas.
Esta colaboración entre la iglesia y el régimen no pasó desapercibida. En los comentarios a la publicación, varios usuarios expresaron su indignación. Deniris Ponce De León cuestionó si los niños fueron también informados de cómo el mismo sistema que promueve el adoctrinamiento fue el que discriminó a las personas por su fe en Dios y las encarceló por ello. Otras personas, como Asere Backagain, condenaron el acto, recordando que la iglesia debería enseñar principios cristianos, no ideologías militares que van en contra de los valores del cristianismo.
La noticia de este adoctrinamiento llega en un contexto más amplio de control político sobre la infancia en Cuba. Recientemente, el presidente Miguel Díaz-Canel aprovechó el aniversario de la muerte de Fidel Castro para reforzar el culto al régimen, utilizando a niños en su propaganda. Al igual que en este caso, el uso de los menores para perpetuar el sistema político sigue siendo una estrategia que no cesa.
¿Qué opinas de este tipo de prácticas? ¿Crees que la iglesia debería mantenerse al margen de la política? ¡Déjanos tus comentarios y comparte tu opinión sobre el futuro de la educación y la espiritualidad en Cuba!