Las intensas lluvias que azotaron este viernes el municipio costero de Imías, en la provincia de Guantánamo, provocaron el colapso del puente provisional que conectaba la cabecera municipal con el Consejo Popular de Jesús Lores y otras comunidades cercanas. Este evento deja nuevamente incomunicados a cientos de habitantes, generando preocupación en una región aún afectada por las secuelas del huracán Óscar.
El puente provisional: una solución temporal que no resistió
El puente provisional sobre el río Imías, construido con una estructura tipo TM3 de uso militar, había sido instalado tras los daños ocasionados por el huracán Óscar en octubre pasado. Aunque fue diseñado como una solución temporal, el colapso de esta estructura ahora afecta a comunidades como San Ignacio, Los Calderos, El Cuero y Explanada de Duaba.
“Fuertes lluvias desprenden el puente de contención que pusieron emergentemente en Imías”, comentó en Facebook el periodista Miguel Reyes Mendoza, conocido por su perfil ‘Miguel Noticias’. Su publicación, acompañada de imágenes y videos, evidenció el impacto de las lluvias torrenciales que socavaron las bases del puente.
La crecida del río, principal causa del colapso
Las precipitaciones intensas en esta zona montañosa ocasionaron una crecida inesperada del río Imías, cuyas corrientes superaron la capacidad de resistencia del puente TM3. Esta estructura, construida con apoyo de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, tenía una capacidad máxima de 60 toneladas, pero no pudo soportar las condiciones extremas generadas por las lluvias.
El huracán Óscar ya había dejado huellas profundas en esta región en octubre, con acumulados de más de 600 milímetros de lluvia en menos de 48 horas. Estos desastres provocaron severos daños en viviendas e infraestructura vial, haciendo necesario el uso de soluciones temporales como este puente.
Impacto social y económico en Jesús Lores
Jesús Lores, uno de los principales consejos populares de Imías, alberga a más de 5,000 habitantes distribuidos en seis asentamientos. Este núcleo es clave para la región, ya que cuenta con diez centros educativos, cinco consultorios médicos, una farmacia, una sala de rehabilitación y diversas unidades comerciales.
El colapso del puente ha dejado a estas comunidades sin acceso terrestre, lo que complica la distribución de suministros esenciales y el acceso a servicios básicos. Los residentes enfrentan ahora una situación de aislamiento que podría prolongarse si no se toman medidas inmediatas.
Respuestas pendientes de las autoridades
Hasta el momento, las autoridades locales no han emitido un comunicado oficial sobre los planes para restablecer el paso hacia las comunidades afectadas. Sin embargo, los residentes esperan que se inicien pronto los trabajos de reparación o la construcción de una solución definitiva que garantice la conectividad en esta zona.
Mientras tanto, los habitantes de Jesús Lores y las comunidades vecinas deben lidiar con las consecuencias de este nuevo golpe climático, que pone en evidencia las vulnerabilidades estructurales en regiones afectadas por fenómenos naturales recurrentes.