En Camagüey, un hecho escalofriante ha dejado a toda Cuba sin palabras. Aliesky Martínez Ferrer, un hombre del municipio Minas, ha sido acusado de cometer un brutal crimen contra su propio hijo y de agredir a una mujer embarazada. La historia, tan impactante como desgarradora, incluye persecuciones, disparos y una captura digna de película.
La captura: disparos, heridos y perros entrenados
Según reportes, la policía tuvo que disparar contra Martínez Ferrer durante su captura, logrando finalmente reducirlo. Un disparo en la cabeza lo dejó gravemente herido y fue sometido a una cirugía antes de ser puesto bajo custodia policial. Actualmente, está bajo vigilancia médica mientras espera enfrentar un juicio por homicidio.
El portal noticioso La Tijera compartió una foto del acusado en una camilla, lo que confirma la gravedad de su estado. Antes de su detención, incluso logró entrar en una unidad policial y agredir a un oficial con un machete, dejando claro que estaba dispuesto a todo.
Finalmente, tras un operativo que involucró el uso de perros entrenados y la colaboración de los vecinos, la policía logró capturarlo en la madrugada del 2 de diciembre.
La víctima: un niño inocente
El crimen ocurrió el pasado 26 de noviembre. El pequeño Edgar Aliesky Martínez Torres fue asesinado en un acto que muchos califican como un «feminicidio vicario». Este tipo de violencia extrema ocurre cuando el agresor daña a un familiar cercano para herir emocionalmente a su pareja, y en este caso, el objetivo era la madre del menor.
Feministas y activistas de organizaciones como YoSíTeCreo en Cuba y el Observatorio de Género Alas Tensas (OGAT) han condenado el caso, destacando que es una muestra del aumento de la violencia feminicida en la isla.
Más víctimas en el camino
Pero la violencia de este hombre no se detuvo ahí. Durante su huida, agredió brutalmente a una mujer embarazada que iba camino a una consulta médica. Según informes, la golpeó, abusó de ella y le robó su teléfono móvil. La mujer se encuentra hospitalizada en estado crítico en el Hospital Materno de Camagüey.
¿Qué lo motivó?
Aunque los detalles aún son confusos, se especula que el detonante de este terrible acto fue la negativa de la madre del niño a retomar la relación con Martínez Ferrer. Esto habría provocado una cadena de violencia que dejó a un niño muerto, una mujer gravemente herida y a toda una comunidad conmocionada.
Justicia en camino
El Ministerio del Interior (MININT) confirmó la captura de Martínez Ferrer y aseguró que está trabajando para legalizar los hechos y garantizar un proceso penal justo. Mientras tanto, los pobladores del municipio Minas siguen aportando información clave para cerrar este caso que ha dejado una cicatriz profunda en la sociedad cubana.
Este caso nos recuerda la importancia de hablar sobre la violencia de género y tomar medidas firmes para prevenirla. La comunidad y las autoridades tienen la responsabilidad de no quedarse en silencio frente a estos actos atroces.