Mientras millones de cubanos enfrentan un apagón masivo desde la madrugada del miércoles, el nieto del fallecido dictador Fidel Castro, Sandro Castro, se ha convertido en el epicentro de una nueva controversia. Pese a la grave crisis energética que golpea a la isla, Castro confirmó que su fiesta de cumpleaños seguiría adelante, dejando en claro lo desconectada que está la élite castrista del sufrimiento de su pueblo.
La confirmación del evento llegó a través del perfil de Instagram de carluchin_verde, quien se identificó como el organizador de la celebración. «Todo se mantiene, nos vemos mañana», escribió en una historia de Instagram, un mensaje que fue interpretado por muchos como un desplante a los millones de cubanos afectados por el tercer apagón masivo en menos de dos meses.
Una Fiesta de Lujo en el Bar EFE del Vedado
A pesar de las críticas generalizadas, Sandro Castro anunció con antelación que su cumpleaños sería celebrado «por todo lo alto» en el bar EFE, ubicado en el Vedado habanero. Este local, que él mismo administra, fue seleccionado para un evento que promete tener un aire elitista, con un código de vestimenta que exige a los asistentes vestir de blanco.
Las redes sociales pronto se inundaron de publicaciones que mostraban los preparativos para la fiesta, lo que generó indignación entre los usuarios. En medio de una situación marcada por la escasez de recursos, las constantes interrupciones del servicio eléctrico y una crisis económica sin precedentes, la ostentación del nieto del dictador fue vista como un insulto a la realidad diaria de la mayoría de los cubanos.
«Tengo Derecho a Celebrar»: La Defensa de Sandro Castro
Tras el revuelo causado por el anuncio, Sandro Castro recurrió a las redes sociales para defenderse. En un mensaje que buscaba justificar la celebración, Castro declaró que él es un «joven sencillo» que tiene derecho a disfrutar de su cumpleaños. Estas palabras, lejos de calmar los ánimos, avivaron las críticas en su contra.
Por otro lado, el organizador del evento también publicó un video en el que intentó restar importancia a la controversia. «No acostumbro mucho a hacer este tipo de videos, pero quería hacer una excepción porque he visto mucha polémica y muchas páginas atacándome porque yo soy el organizador del evento… del cumpleaños de Sandro Castro el jueves 5 de diciembre en el EFE», expresó el joven.
Indignación Generalizada
La reacción de la opinión pública no se hizo esperar. Las redes sociales se llenaron de mensajes condenando lo que muchos consideran una muestra de desprecio hacia el pueblo cubano. «Mientras nosotros estamos en la oscuridad, ellos están de fiesta», comentó un usuario en Twitter. Otros destacaron que esta actitud es un reflejo del privilegio y la desconexión de la élite castrista.
El contexto no podría ser más delicado: Cuba enfrenta una de las peores crisis energéticas de su historia reciente, con apagones frecuentes que afectan tanto la vida cotidiana como la ya precaria economía de la isla. La decisión de mantener una fiesta de lujo en medio de esta situación no solo genera controversia, sino también reabre el debate sobre las desigualdades en la sociedad cubana.