En la madrugada del miércoles, Cuba se sumió en la oscuridad tras un apagón generalizado que paralizó al país. Pero esta vez no solo se apagaron las luces: el colapso eléctrico también provocó una caída masiva de la conexión a Internet, dejando a millones de cubanos incomunicados en un momento crítico.
La desconexión del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) ocurrió a las 2:08 am, y las repercusiones en el ciberespacio no tardaron en hacerse sentir. El grupo independiente Diktyon, encargado de monitorear la actividad de Internet en la Isla, compartió un gráfico revelador en Twitter: el volumen de tráfico cayó en picada justo después del apagón.
Cuba Offline: El Impacto en el Tráfico de Datos
Cinco horas después del colapso, la cantidad de bytes transferidos desde y hacia Cuba seguía en niveles alarmantemente bajos. Según Diktyon, el tráfico de datos apenas alcanzaba entre el 39% y el 50% de lo habitual para esa hora en días anteriores. En términos simples: medio país está desconectado.
El monopolio estatal de comunicaciones, ETECSA, confirmó lo que muchos ya sospechaban: el servicio de telefonía móvil estaba gravemente afectado. Según el informe publicado en Twitter, a la 1:00 pm el 53% del país seguía sin acceso a la red móvil. Las provincias más golpeadas fueron Camagüey, con un 63% de afectación, y La Habana, con un 60%.
¿Qué Dice ETECSA?
En un intento de calmar las aguas, ETECSA afirmó que la disponibilidad del servicio aumentará “según se restablezca la energía”. Pero los cubanos, acostumbrados a largas horas de apagones y promesas incumplidas, no están convencidos. ¿Qué garantías hay de que la conexión vuelva pronto? Por ahora, parece que los usuarios tendrán que esperar… y esperar.
Una Desconexión Que Refleja Una Crisis Mayor
El apagón generalizado y la caída masiva de Internet son solo síntomas de un problema más profundo: la fragilidad del sistema eléctrico y de las telecomunicaciones en Cuba. Mientras el pueblo enfrenta días cada vez más oscuros, literalmente y en sentido figurado, las respuestas siguen siendo insuficientes.
¿Hasta cuándo podrá resistir Cuba esta desconexión, no solo de la electricidad, sino también de las soluciones reales? La crisis sigue dejando al país a oscuras, dentro y fuera del ciberespacio.