La Empresa de Correos de Cuba en el municipio de Carlos Manuel de Céspedes, provincia de Camagüey, fue escenario de un robo que dejó a la entidad sin más de medio millón de pesos. Este incidente, reportado por la prensa oficialista cubana, ha generado interrogantes, ya que no se ofrecieron detalles claros sobre las circunstancias en que ocurrió el delito.
La respuesta del MININT
El mayor Agustín Pulgares Balart, jefe del Ministerio del Interior (MININT) en la localidad, explicó que una vez reportado el hecho, se inició una investigación que incluyó la recolección de huellas y otras evidencias. Gracias a la colaboración ciudadana, lograron identificar a los presuntos autores. Este operativo permitió recuperar parte del dinero robado, el cual será utilizado para garantizar el pago de la seguridad social.
Aunque las autoridades no identificaron a los implicados ni precisaron cuántos participaron en el delito, señalaron que los detenidos se encuentran bajo la custodia de la Fiscalía General, la cual evalúa las pruebas para su procesamiento judicial.
Otros delitos recientes en la localidad
La prensa oficialista también destacó otros casos resueltos recientemente por las autoridades en el municipio. Entre ellos, la recuperación de una computadora robada de la Empresa Municipal de Acopio y un caballo sustraído de una finca en la comunidad de Cinco Palmas.
Además, el MININT informó sobre la confiscación de:
- 190 litros de petróleo en Carlos Manuel de Céspedes.
- 20 litros de petróleo en el municipio Florida.
- Más de 1,200 litros de gasolina.
- Seis sacos de fertilizantes, 260 litros de miel, dos balas de gas licuado y varios metros de polea, entre otros bienes.
Estas acciones forman parte de los esfuerzos de las autoridades para combatir el aumento de delitos relacionados con el robo y el contrabando de bienes en la isla.
Una crisis que alimenta la inseguridad
La rápida respuesta de las autoridades en casos que involucran propiedades estatales contrasta con las denuncias de ciudadanos, quienes aseguran que los delitos contra particulares suelen resolverse con menor eficiencia. En los últimos dos años, Cuba ha experimentado un notable aumento en el número de delitos, impulsado por una crisis económica sin precedentes.
La inflación galopante, la escasez de productos básicos y el colapso de servicios públicos han exacerbado la desesperación de la población. Este deterioro económico ha incrementado no solo los robos a instituciones estatales, sino también la inseguridad en los hogares cubanos.