María del Carmen, el intrigante barrio habanero donde más infidelidades se cometen en Cuba (+ Video)

Redacción

En las profundidades de La Habana se encuentra María del Carmen, un barrio residencial que se ha convertido en uno de los destinos más singulares para quienes buscan discreción y entretenimiento. Este lugar esconde tras su tranquila apariencia una concentración inusual de hostales y hospedajes adaptados a diversas necesidades, atrayendo tanto a locales como a visitantes. Desde habitaciones con jacuzzi y sistemas de hidromasaje hasta espacios con tubos de baile, María del Carmen es un reflejo de cómo la creatividad cubana encuentra soluciones incluso en la escasez.

La realidad tras los hostales

En un país donde los hoteles resultan inaccesibles para la mayoría, María del Carmen ofrece opciones más asequibles y flexibles. Aunque los precios pueden variar significativamente, el costo promedio de dos horas en uno de estos espacios ronda los 1,500 pesos cubanos, mientras que las estadías con servicios adicionales, como jacuzzis y sistemas de lujo, pueden alcanzar los 3,000 pesos por tres horas. La discreción es una de las características más valoradas: muchos hostales permiten el acceso directo en automóvil, garantizando privacidad desde el ingreso.

Un negocio en auge

Según los residentes, el barrio alberga más de 100 hostales, cada uno adaptado a diferentes presupuestos y necesidades. Desde casas completas hasta habitaciones en espacios compartidos, María del Carmen se ha convertido en un punto clave para quienes buscan evadir la rutina o celebrar encuentros especiales. Algunos de estos lugares destacan por incluir detalles como luces de ambiente, espejos estratégicos y servicios gastronómicos adicionales.

El pasado de las posadas en Cuba

Antes de la popularización de los alquileres privados, existían las posadas estatales, lugares que ofrecían habitaciones por horas a precios accesibles. Aunque su higiene dejaba mucho que desear, eran una opción común para parejas que buscaban un espacio privado. En María del Carmen, algunas construcciones originales de estas posadas aún permanecen en pie, recordando una época en la que estos lugares eran una parte integral de la vida social cubana.

La discreción como clave del negocio

Uno de los mayores atractivos de María del Carmen es su capacidad para ofrecer privacidad a sus clientes. Los hostales cuentan con sistemas de reserva que permiten a los visitantes planificar su llegada sin preocupaciones. Además, las puertas discretas y la posibilidad de estacionar dentro de las propiedades contribuyen a crear un ambiente seguro y cómodo.

Un destino para todos los gustos

Aunque algunos hostales se centran en la simplicidad, otros ofrecen lujos inusuales en el contexto cubano. Jacuzzis, sistemas de hidromasaje, espejos en techos y barras de baile son solo algunas de las opciones que estos lugares tienen para sorprender a sus visitantes. Esto convierte a María del Carmen en un punto de referencia para quienes buscan experiencias diferentes y exclusivas.