La canción «El Punto» se ha convertido en un himno para los seguidores del fallecido reguetonero cubano El Taiger, quien perdió la vida el pasado 10 de octubre. Este tema, caracterizado por su letra pegajosa y ritmos vibrantes, no solo captura la esencia del género urbano, sino que también representa un legado emocional para los fanáticos del artista.
Éxito arrasador en plataformas digitales
A menos de dos meses de su lanzamiento, «El Punto», en colaboración con Oniel Bebeshito y Charly & Johayron, ha superado los 20 millones de reproducciones en YouTube, consolidándose como uno de los temas más populares del año. Este logro refleja la inmensa popularidad del reguetonero y la conexión que mantenía con su público.
En Instagram, Bebeshito compartió una publicación del productor Ernesto Losa, quien celebró el éxito de la canción, destacándola como un homenaje involuntario al talento y carisma de El Taiger.
Una canción que conectó antes y después de su estreno
Incluso antes de su lanzamiento oficial, «El Punto» ya era un fenómeno en redes sociales. En sus últimos conciertos en vivo, El Taiger interpretó el tema, logrando que su público lo cantara al unísono. Esto demostró cómo la canción se había vuelto viral, anticipando el impacto que tendría tras su estreno.
Después de su fallecimiento, «El Punto» resonó en los homenajes realizados tanto en Cuba como en Miami. Artistas y fanáticos utilizaron esta pieza musical para rendir tributo al reguetonero, destacando el poder de su música para unir a las personas en momentos de dolor.
El misterio de Glen, el muñeco icónico
El videoclip de «El Punto» también ha generado gran interés, especialmente por la aparición de Glen, un muñeco que se convirtió en un símbolo distintivo de El Taiger. Desde su estreno, Glen ha suscitado innumerables debates en redes sociales, con muchos especulando sobre su significado y su relación con la temática de la canción.
Un legado que perdura
El Taiger dejó una huella imborrable en el género urbano cubano. «El Punto» no solo es un testimonio de su creatividad musical, sino también un recordatorio de su capacidad para conectar con su público de una manera única. Mientras su música sigue acumulando reproducciones y llegando a nuevos oyentes, su legado sigue vivo en los corazones de quienes lo admiraban.
En palabras de uno de sus colegas: «El Taiger no se ha ido; su música y su impacto vivirán para siempre». Esta afirmación refleja el sentimiento colectivo de una comunidad que encuentra consuelo y fortaleza en el legado musical del reguetonero.