Tras casi dos años de ausencia en las redes sociales, el reconocido locutor cubano Magdiel Pérez Labrada ha reaparecido para contar su historia. Conocido por su voz en programas como Haciendo Radio y Hola Habana, Magdiel reveló este miércoles por qué decidió dejar la isla a finales de 2022: todo por cumplir una promesa a su madre, una valiente sobreviviente de cáncer.
Un nuevo comienzo con «Gente como uno»
Magdiel regresó al ciberespacio con su propio canal de YouTube, llamado ‘Gente como uno’, donde promete conectar con su audiencia de una manera especial. En su primer video, el locutor no solo anunció este emocionante proyecto, sino que compartió su historia de emigración, marcada por el amor y el sacrificio familiar.
La promesa a su madre: un viaje lleno de significado
En 2014, mientras su hermano vivía fuera de Cuba, surgió la idea de que él y su madre, Elaine, también se unieran a la familia en Estados Unidos. Sin embargo, el tiempo pasó y todo quedó en planes. Fue en 2018 cuando la llamada de su hermano, llorando, marcó un antes y un después: su madre había sido diagnosticada con cáncer de colon.
“Ella nunca perdió la fe ni la alegría”, contó Magdiel, conmovido al recordar cómo su madre, con más de 70 años, enfrentó y venció la enfermedad. Esta experiencia reforzó la decisión del locutor: en 2022, dejó su carrera de 25 años en los medios cubanos para estar junto a ella y cumplir aquella promesa.
De la radio a una fábrica de ladrillos
La transición no fue fácil. Magdiel detalló cómo su primer trabajo en Estados Unidos fue en una fábrica de ladrillos en Tennessee. Sin embargo, asegura que no había miedo ni vergüenza, solo gratitud por tener salud y empleo. “Lo importante es avanzar paso a paso”, reflexionó, destacando cómo cada experiencia lo ha hecho más disciplinado.
Con el tiempo, el locutor logró comprarse un carro, aprender a manejar y mudarse con su madre a Texas, donde trabajó como lavaplatos en un restaurante. Sin importar las dificultades, Magdiel agradeció cada oportunidad, especialmente a quienes ayudaron a su madre durante este proceso.
Un reinicio lleno de lecciones
“Creo que nos merecíamos esta segunda oportunidad”, afirmó Magdiel, quien hoy disfruta de la compañía de su madre y de una vida más cercana a su familia. También tuvo palabras para quienes lo criticaron cuando salió de Cuba: “No he tenido tiempo para ellos”, sentenció con tranquilidad.
Ahora, con nuevas metas y mucho aprendido, Magdiel invita a otros inmigrantes a tomar decisiones personales y no dejarse influir por lo primero que escuchan. Su historia no es solo un relato de emigración, sino un testimonio de amor, sacrificio y segundas oportunidades.
