La comunidad de Mantilla, ubicada en el municipio de Arroyo Naranjo, La Habana, está sumida en la conmoción tras el violento asesinato de Leonardo Garlobo Castellanos, un padre de tres hijos menores de edad. Este trágico suceso ha dejado una profunda huella de dolor e indignación entre sus familiares, vecinos y amigos.
Un Crimen Brutal
El lamentable incidente ocurrió el pasado 19 de noviembre, tan solo tres días después de que Garlobo Castellanos celebrara su cumpleaños número 41. De acuerdo con informaciones compartidas en redes sociales, un grupo de aproximadamente 15 personas irrumpió en su vivienda, rompiendo la puerta y atacándolo brutalmente. Testimonios de supuestos testigos indican que los agresores apuñalaron y golpearon a la víctima con un palo frente a su familia, incluyendo a sus hijos menores y una hija de 16 años. Sin embargo, este extremo aún no ha sido confirmado por las autoridades ni medios oficialistas.3
«Soy un amigo del fallecido, él no era de problema ni nada que parezca. Todo fue por un mal entendido durante un partido de futbol, problemas de muchachos, como se dice, pero luego los agresores no quisieron ni hablar. Era un hombre enfermo, el apenas podía ni ver. Todo fue un abuso y no le dieron tiempo a nada», comentó en redes sociales un internauta.
Dolor y Solidaridad en la Comunidad
La noticia del asesinato fue confirmada por el medio hermano de la víctima, Leonardo Garlobo Acosta, quien expresó su profundo dolor a través de un emotivo mensaje en redes sociales: “Hoy, mañana y siempre, te voy a recordar aunque te me fuiste y dejaste este dolor que nunca lo voy a superar. Espero que estés en un lugar mejor… Te amo, mi negro y hermano. Que Dios te tenga en la gloria”.
Vecinos y amigos también se unieron en las redes sociales para compartir anécdotas y mensajes de solidaridad hacia los hijos de la víctima, quienes quedan huérfanos tras esta tragedia. Leonardo había asumido la crianza de sus pequeños después de la muerte de su esposa hace algunos años, lo que lo convertía en el pilar de su hogar. Su carácter afable y su sentido de responsabilidad hacia su familia lo hacían muy querido en su comunidad.
Una Familia Devastada
Zenaida Bruzón Castillo, madre de una de las hijas de Leonardo, también manifestó el impacto de esta tragedia: “Era un buen padre, hijo y amigo. Esto ha dejado a los niños sin padre, y dos de ellos ya no tienen madre. Es una injusticia lo sucedido”. Su testimonio refleja la magnitud de la pérdida y las profundas secuelas que deja este hecho violento en los hijos y allegados de la víctima.
Exigencia de Justicia
Hasta el momento, las autoridades han detenido a dos de los presuntos agresores, mientras los residentes de Mantilla claman por justicia y demandan mayor seguridad en la zona. La despedida a Leonardo reunió a numerosos vecinos, quienes recordaron su bondad y compromiso con su familia, al tiempo que expresaban su indignación por la creciente violencia en la comunidad.
Un Contexto de Inseguridad Creciente
El caso de Leonardo no es aislado. La violencia en Cuba ha aumentado de manera alarmante en los últimos años, con crímenes similares reportados con preocupante frecuencia. Recientemente, en El Fanguito, un barrio habanero de El Vedado, un joven identificado como Alain Nolasco fue brutalmente asesinado en una pelea callejera que involucró a más de diez personas. Asimismo, el cuerpo sin vida del joven Jesús David Corcho Pérez, de 22 años, fue hallado tras varios días desaparecido en Jovellanos, Matanzas. También se reportó el espeluznante asesinato de una familia entera en San Luis, Santiago de Cuba, cuyo hogar fue presuntamente incendiado para encubrir el crimen.