Cerca de 350 niños de Pilón están recibiendo clases en casas de campaña tras los fuertes terremotos que afectaron la zona

Redacción

Tras los devastadores sismos ocurridos el pasado 10 de noviembre, que afectaron severamente la infraestructura escolar en Pilón, en la provincia de Granma, alrededor de 350 niños han sido trasladados a una escuela de campaña. Este centro educativo temporal fue instalado en una base militar con el apoyo de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR).

Reubicación en «Amiguitos de las FAR»

El periodista Jorge Luis Ríos Frías informó a través de Facebook que la nueva escuela, bautizada como «Amiguitos de las FAR», acoge a los estudiantes del seminternado Augusto César Sandino, una de las instituciones más dañadas por los terremotos.

Según Ríos, el lugar cuenta con las condiciones necesarias para garantizar la continuidad del proceso educativo. “Las casas de campaña, ahora convertidas en aulas, buscan asegurar la calidad del aprendizaje. Esto constituye una prioridad para el sector educacional del municipio,” destacó.

El periodista también subrayó la colaboración de las FAR: “Con esta iniciativa, las FAR reafirman su compromiso de favorecer el desarrollo y bienestar del pueblo cubano.”

Aulas en casas de campañas.Asegurar la continuidad del proceso docente educativo constituye una prioridad para el…

Posted by Jorge Luis Ríos Frías on Wednesday, November 20, 2024

Preocupación en las Familias

Mientras tanto, los padres de los niños afectados esperan que las reparaciones en las escuelas avancen con rapidez para devolver a los estudiantes un entorno más estable y seguro. Desde los sismos de magnitudes 6.0 y 6.7 que sacudieron la región el 10 de noviembre, las familias han enfrentado días marcados por el temor y la incertidumbre.

Este jueves, un nuevo sismo de magnitud 4.0 volvió a sacudir la provincia de Granma. Aunque no causó daños materiales ni víctimas humanas, fue perceptible en Pilón, ubicado a tan solo 19 kilómetros del epicentro.

Viviendo en la Incertidumbre

A una semana de los sismos principales, muchos habitantes de Pilón continúan viviendo en casas de campaña, enfrentándose a la falta de recursos básicos y a la incertidumbre de un futuro incierto. Si bien el gobierno dispuso estas viviendas temporales para las familias damnificadas, la medida ha recibido críticas por su alcance limitado y por no atender a otras comunidades igualmente afectadas.