Una familia cubana está utilizando las redes sociales para pedir ayuda en la búsqueda de Yusdel Concepción Domínguez, un joven que desapareció junto a su esposa y otros familiares en una embarcación rústica el pasado 24 de diciembre. Desde entonces, no han tenido noticias de ellos ni de los demás ocupantes de la lancha.
Un clamor en redes sociales
La tía del joven, Maritza Concepción Zarmiento, publicó un emotivo mensaje en redes sociales, donde explica la angustiosa situación:
«Desde el 24 de diciembre no sabemos nada de mi sobrino, su esposa y los demás familiares que viajaban con ellos. Estamos todos destrozados. Dejaron niños pequeños en Cuba y necesitamos ayuda para encontrarlos. Que Dios los ilumine y nos permita saber de ellos”, escribió.
Otra mujer identificada como Yuvisleidy Santana, cuyo esposo también viajaba en la misma embarcación, expresó su frustración ante la falta de información: «Mi vida, no hay ninguna información. Los he buscado por todos lados y nada”, comentó en respuesta a la publicación.
Una tragedia que se repite
El caso de Yusdel y los ocupantes de la lancha no es aislado. Cada año, cientos de cubanos emprenden el peligroso viaje marítimo hacia Estados Unidos en embarcaciones improvisadas, enfrentando condiciones extremas en busca de mejores oportunidades.
Según un informe del Programa de Migrantes Desaparecidos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), al menos 142 cubanos perdieron la vida en estas travesías durante los primeros ocho meses de 2024. Este dato forma parte de un panorama más amplio que incluye 291 migrantes muertos o desaparecidos en rutas marítimas del Caribe, un incremento del 18% en comparación con los 247 casos reportados en 2023.
El costo humano de la migración
La desaparición de Yusdel y su familia refleja la desesperación que impulsa a muchos cubanos a dejar su tierra natal, enfrentando los peligros del Estrecho de Florida, conocido por sus aguas traicioneras y los frecuentes naufragios.
Las historias de familias rotas y niños que quedan atrás son un recordatorio constante del costo humano de la migración. En muchos casos, las familias no logran saber si sus seres queridos sobrevivieron o perecieron en el intento, dejando un vacío desgarrador.