Dos semanas después de que el huracán Rafael pasara cerca de Cuba, La Habana sigue sumida en el caos. Aunque el ciclón no golpeó directamente la ciudad, los estragos que dejó al borde de su trayectoria han puesto a prueba, una vez más, la capacidad de respuesta de las autoridades.
Falta de Agua: Más de 115,000 Personas Afectadas
Uno de los problemas más graves es la falta de agua potable. Según datos oficiales, más de 115,000 habaneros están sufriendo interrupciones en el suministro, especialmente en zonas del oeste de la ciudad. Municipios como Guanabacoa, San Miguel del Padrón y Arroyo Naranjo reportan días sin una gota de agua, complicando aún más el día a día de sus residentes.
La causa principal parece estar en las averías del sistema de Cosculluela, pero lo cierto es que las promesas de reparación han quedado en palabras. “Dicen que lo arreglan mañana, pero llevamos dos semanas igual”, se queja una vecina de La Lisa.
Basura por Todos Lados: Un Riesgo Sanitario en Aumento
Otro punto crítico es la acumulación de desechos. Aunque las autoridades aseguran que están trabajando en todos los municipios, la realidad en las calles de barrios como Marianao y Playa muestra otra cara. Montañas de basura inundan las esquinas, convirtiendo algunas zonas en focos de insalubridad.
“En mi barrio hace semanas que no pasa el camión de la basura. Esto ya no es vida”, lamenta un vecino de Boyeros. A pesar de los esfuerzos anunciados, la limpieza comunal sigue siendo insuficiente y caótica.
Apagones e Incertidumbre en la Reconstrucción
Los cortes eléctricos también son parte del panorama diario en La Habana. Sin cifras claras sobre cuántas viviendas siguen sin servicio, los ciudadanos denuncian la lentitud y la desorganización en los trabajos de recuperación.
Por otro lado, la reparación de viviendas dañadas avanza a paso de tortuga. Las autoridades no han ofrecido números concretos sobre el impacto del huracán ni el progreso en las reparaciones, dejando a muchas familias en el limbo.
El Gobierno Promete, Pero la Gente Espera Acciones
Esta semana, el Consejo de Defensa Provincial volvió a pedir paciencia y colaboración a la ciudadanía. En un comunicado destacaron que “se está trabajando en unidad para devolver la provincia a la normalidad con prontitud”. Sin embargo, para los vecinos de La Habana, estas palabras suenan huecas frente a la realidad que enfrentan día tras día.
La Habana Espera Soluciones
El huracán Rafael ya es historia, pero la crisis que dejó en La Habana sigue siendo un problema actual. Los apagones, la falta de agua y la basura acumulada son más que inconvenientes: son un reflejo de una gestión ineficaz que tiene a miles de cubanos viviendo entre el desamparo y la incertidumbre.
La ciudad necesita respuestas urgentes, y sus habitantes esperan que esta vez las promesas se conviertan en hechos. Mientras tanto, el día a día de los habaneros sigue marcado por el esfuerzo de resistir en medio del caos.
