La influencer cubana Flor de Cuba ha sido objeto de críticas en redes sociales debido a los videos donde muestra su estilo de vida en la isla. Para ella, estas reacciones surgen de una percepción equivocada que asocia vivir en Cuba con estar condenado a la pobreza. Desde Miami, donde se encuentra de visita, la creadora de contenidos aprovechó para responder a estos comentarios en un video publicado en Instagram.
En la descripción del video, Flor de Cuba reflexionó sobre las clases sociales en la isla: “En Cuba existen clases sociales como en todo el mundo, solo que en el resto del mundo los demás no se ofenden por la prosperidad de otros ni le piden a otros que dejen de vivir bien por ‘empatía’”, escribió.
Cuestionando la percepción de la prosperidad en Cuba
La influencer rechaza que las críticas estén dirigidas únicamente a su contenido, argumentando que lo que realmente molesta es el lugar desde donde lo hace. “No te molesta ver a un cubano presumir o vivir bien en otro país, te molesta que presuma y viva bien en Cuba”, afirmó en su video. Según Flor, este pensamiento es «retorcido» y va en contra de cualquier intento por superar la desigualdad. Además, invita a sus críticos a celebrar los logros individuales de quienes logran prosperar dentro de un sistema complicado.
“Si fueras coherente, deberías ponerte contento si alguien logra romper esa barrera de la miseria”, añadió, insistiendo en que los logros individuales no deberían ser vistos como una afrenta, sino como una fuente de inspiración.
Una visión sobre las clases sociales en la isla
Flor de Cuba abordó también la realidad de las clases sociales en Cuba, un tema que ha sido tabú durante décadas. Según su perspectiva, la sociedad cubana ya está dividida en estratos sociales, y esto no debería ser motivo de conflicto. “Creo que es hora de dejar de romantizar la realidad”, comentó, haciendo un llamado a reconocer la existencia de estas diferencias con madurez y a dejar de culpar a quienes prosperan.
Para la influencer, criticar a quienes tienen la posibilidad de llevar una vida más cómoda dentro de la isla es una forma de desviar la atención de los verdaderos problemas estructurales que enfrenta el país. “Esas personas que han logrado salir adelante no tienen la responsabilidad de absolutamente nada, ni siquiera pueden cambiar para bien o para mal la situación económica de un país”, afirmó con firmeza.
Un mensaje para los críticos
Flor de Cuba concluyó su intervención destacando que los logros individuales no deberían ser motivo de resentimiento, sino de inspiración. “Es hora de ver a esas personas como una muestra de lo que se puede lograr, no como culpables de nada”, dijo, en un claro llamado a la empatía y al reconocimiento de los esfuerzos personales.
El mensaje de Flor ha generado debate entre quienes apoyan su visión y quienes consideran que mostrar una vida acomodada en un país con tantas carencias es insensible. Sin embargo, la influencer se mantiene firme en su postura, defendiendo su derecho a prosperar y a compartirlo con sus seguidores.