Cuba hundida en apagones y hambre, pero el Gobierno celebra la Bienal de La Habana: ¡Los cubanos no lo creen!

Redacción

La Bienal de La Habana 2024 está causando más controversia que nunca. Mientras en Cuba se enfrentan apagones interminables, el hambre golpea a muchas familias y la destrucción causada por los huracanes Rafael y Oscar aún está fresca en la memoria, el gobierno sigue con su agenda cultural. Y claro, eso no ha caído nada bien en la isla. A través de redes sociales, decenas de cubanos han manifestado su indignación por la celebración de este evento en momentos tan críticos. La pregunta es clara: ¿es este el momento para un evento de arte o simplemente una burla al pueblo?

Indignación Generalizada en las Redes Sociales

Una publicación de Cubadebate, en la que se anunciaba una Mesa Redonda dedicada a la Bienal de La Habana, desató la furia de muchos cubanos. Comentarios como el de Ismara Rodríguez, quien exclamó: “¡Tienen que parar! ¡Media Habana, Artemisa y alrededores están jodidos y ustedes hablando de Bienal!” reflejan el sentimiento generalizado de quienes consideran que en medio de la crisis, el arte y la cultura deberían ser un segundo plano. ¿Cómo se puede celebrar un evento de tal magnitud cuando las familias cubanas carecen de lo más básico?

Una Bienal que No “Come” ni “Abastece” Energía

El evento, convocado por el Ministerio de Cultura, se celebra del 15 de noviembre al 28 de febrero de 2025, pero no todos están celebrando. Para muchos, como Natacha Granados, la realidad del país no está para celebraciones. “El país no está en condiciones de efectuar ningún evento, con todos los problemas que están golpeando a la población constantemente”, señaló en redes sociales. Y es que, mientras la Bienal se promociona como un evento cultural clave, lo que los cubanos necesitan urgentemente es energía, comida y reconstrucción, no más distracciones.

El Arte Enfrentado a la Realidad Cubana

Este evento se enmarca en un contexto de censura y represión que ha golpeado a la sociedad civil independiente y a artistas críticos del régimen. “¿En qué contexto llega la Bienal a Cuba?” cuestionó Otto Reyes Pino. Y es que, para muchos, la destrucción y el caos que han causado los huracanes y la falta de recursos en el país parecen ser más urgentes que cualquier exposición de arte. Sin embargo, la Bienal sigue adelante como si nada estuviera ocurriendo.

¿Una Simulación de Autonomía Creativa?

El evento también ha sido criticado por su falta de autenticidad. En un artículo publicado en Letras Libres, curadores y artistas cubanos como Solveig Font y Coco Fusco cuestionaron el evento, sugiriendo que la Bienal de La Habana se ha convertido en una herramienta del gobierno para crear una “simulación de autonomía creativa” y desviar la atención internacional de los abusos de derechos humanos. Mientras algunos artistas internacionales celebran su participación, muchos cubanos piensan que esta es solo una fachada para tapar las verdaderas necesidades del pueblo.

La Voz de los Prisioneros Políticos en la Bienal

Mientras la Bienal se desarrolla, voces disidentes como la del artista Luis Manuel Otero Alcántara, quien está preso por motivos políticos, siguen alzándose. Desde su encarcelamiento, Otero Alcántara invitó a los participantes de la Bienal a visitarlo como parte de una intervención titulada “Fe de vida”. Este acto simboliza la represión que enfrentan aquellos artistas que se atreven a cuestionar al régimen.

¿Es Este el Momento de Celebrar el Arte?

La Bienal de La Habana, aunque vista como un evento cultural de importancia internacional, ha perdido su brillo en los ojos de muchos cubanos. Con un país devastado por la falta de recursos y la represión, las celebraciones de arte parecen ser una burla a las necesidades más apremiantes de la población. La realidad es que, hoy por hoy, los cubanos no necesitan más propaganda oficial ni eventos que desvíen la atención de los problemas reales.

La indignación sigue creciendo y las críticas a la Bienal de La Habana 2024 parecen lejos de terminar. Mientras el régimen continúa con su espectáculo, el pueblo cubano sigue luchando por sobrevivir.