El cantante cubano El Taiger, conocido por su estilo único en el reguetón, ahora descansa junto a su madre en una capilla del histórico Cementerio de Colón en La Habana, un lugar emblemático de descanso final en Cuba. La capilla fue adquirida y acondicionada por su mánager, Teresa Padrón, como un homenaje permanente al artista y su madre, asegurando que ambos reposen en un lugar seguro y digno.
Un Descanso Eterno con un Legado Familiar
La mánager de El Taiger, Teresa Padrón, compartió en sus redes sociales que la capilla está siendo remodelada con pinturas y arreglos para ofrecer un espacio adecuado para el descanso de los dos seres queridos. En su publicación, Padrón expresó su gratitud a Dios por la oportunidad de brindar este homenaje, asegurando que el lugar de descanso será donado a la familia del artista. “Gracias Diosito, por tanto. Sin ti nada, contigo todo”, escribió Padrón, destacando la importancia del gesto para ella y la familia de El Taiger.
Además, Padrón adelantó su intención de colocar una escultura en la capilla, lo que aportará un toque personal y simbólico a este último lugar de descanso del reguetonero. La mánager también expresó su deseo de que los restos del padre de El Taiger, quien también falleció, puedan reposar allí en el futuro, y detalló que está en conversaciones con la familia Carvajal para hacerlo realidad.
La Emotiva Despedida y Homenajes Póstumos
A un mes de su fallecimiento, los seres queridos de El Taiger realizaron una emotiva visita a su tumba en el Cementerio de Colón, lugar donde reposan sus cenizas. Teresa Padrón compartió el momento en las redes sociales, con un emotivo mensaje dedicado a la prima del artista, quien, visiblemente afectada, colocó flores sobre su tumba. Padrón expresó en su publicación: “Sé lo difícil que es para ti pararte en frente de esa tumba, sé por todo lo que has pasado, lo mucho que amas a tu primo y cuánto lo extrañas”, reflejando el dolor y la ausencia que sentían los más cercanos al artista.
La despedida de El Taiger, ocurrida en octubre, fue un acto cargado de emociones. Familiares, amigos, fanáticos y colegas se unieron para acompañar sus cenizas hasta el Cementerio de Colón, donde descansan los restos del reguetonero. Decenas de cubanos, tal como El Taiger hubiese querido, se despidieron cantando sus canciones más emblemáticas, como “El Sano”, “Habla Matador”, “Marca Mandarina” y “El Punto”, dos de sus últimos éxitos. Estos temas, que se convirtieron en himnos del reguetón cubano, fueron interpretados en un acto de despedida lleno de emociones, en una clara muestra del cariño que la gente tenía hacia él.
Un Último Homenaje de la Familia
Durante el funeral, la hija más pequeña de El Taiger caminó delante de la procesión, tomada de la mano de Teresa Padrón, mientras los asistentes continuaban rindiendo homenaje a su ser querido. En un acto simbólico, al colocar las cenizas de El Taiger en su tumba, los presentes levantaron sus manos al cielo y colocaron flores sobre la lápida, en un gesto de despedida y respeto.
La historia de la despedida de El Taiger resalta no solo el dolor de la pérdida de un artista querido, sino también el amor y la admiración que dejó en su comunidad y su gente. Su música y su legado continúan vivos en el corazón de sus seguidores, quienes lo recordarán siempre no solo por su talento musical, sino también por su humanidad y su contribución a la cultura cubana.
Este homenaje final, con su descanso junto a su madre y posiblemente a su padre en el futuro, simboliza el círculo de amor y respeto que rodeó a El Taiger durante su vida y que sigue vigente incluso después de su partida.