El gobierno de Santiago de Cuba ha implementado medidas de seguridad para proteger a los residentes de la ciudad tras los dos terremotos registrados este domingo en la región oriental de Cuba. Los movimientos sísmicos, que alcanzaron magnitudes de 6.0 y 6.7, respectivamente, activaron protocolos de emergencia en la provincia.
Recomendaciones a la población tras los terremotos
Beatriz Johnson, primera secretaria del Partido en Santiago de Cuba, se dirigió a la televisión nacional para explicar las medidas adoptadas. Tras los dos sismos, el primero registrado a las 10:50 a.m. y el segundo a las 12:49 p.m., Johnson indicó que los dirigentes de la provincia se desplazaron a los 11 edificios altos del municipio cabecera para informar a los residentes sobre la importancia de evacuar a espacios abiertos, considerados más seguros durante eventos sísmicos.
“Es crucial que la población permanezca en lugares abiertos y que, en caso de evacuación, lo hagan de manera ordenada y disciplinada. Bajar de un edificio durante un terremoto puede implicar riesgos, como tropezar o caerse, por lo que es importante concentrarse en las áreas más bajas y trasladarse al polígono de la ciudad escolar 26 de julio, que está cerca de los edificios más altos”, detalló Johnson.
La dirigente también señaló que durante la tarde se evaluarán los daños y que se mantendrán informados a los residentes sobre las acciones a seguir. Además, enfatizó la necesidad de protegerse cerrando las llaves de gas, desconectando los aparatos eléctricos y manteniéndose al tanto de las noticias oficiales para evitar la propagación del pánico.
Daños reportados y medidas preventivas
En cuanto a los daños causados por los sismos, Johnson informó que, de manera preliminar, se había reportado el derrumbe de una pared en el centro de la ciudad, en San Agustín. No obstante, recalcó que se continuarán activando las zonas de defensa para evaluar los daños con base en los informes de la población.
Por su parte, el gobernador de Santiago de Cuba, Manuel Falcón, compartió en sus redes sociales un conjunto de medidas preventivas para que los santiagueros actúen con seguridad en caso de réplicas. Falcón destacó que durante un sismo es fundamental mantener la calma y refugiarse en lugares seguros, como bajo muebles sólidos o en rincones alejados de ventanas y objetos que puedan caer. También recomendó desconectar la electricidad, cerrar las llaves de gas y usar siempre las escaleras en caso de evacuación, evitando los ascensores. Además, sugirió que la población mantuviera a mano un kit de emergencia con agua, alimentos y medicamentos.
Llamado a la acción del presidente Miguel Díaz-Canel
El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, también instó a los habitantes de las zonas afectadas a desalojar los edificios y permanecer en espacios abiertos como medida preventiva ante posibles réplicas. Su llamado a la población se centró en garantizar la seguridad de los residentes y evitar situaciones de riesgo.
Situación sísmica complicada
El doctor Enrique Diego Arango Arias, jefe del Servicio Sismológico Nacional de Cuba, advirtió que la situación sigue siendo compleja debido a la magnitud de los terremotos y las réplicas. En sus redes sociales, Arango señaló que se han reportado muchos daños en Pilón, provincia de Granma, donde se originaron los sismos. A las 10:50 a.m. del domingo, un terremoto de magnitud 6.0 tuvo su epicentro a 48 km al sureste de Pilón. Luego, a las 12:49 p.m., se registró una réplica aún más fuerte, con una magnitud de 6.7, que superó al primer sismo.
“La situación está bastante complicada. Se reportan muchos daños en Pilón, necesitamos información adicional sobre los daños en las áreas afectadas”, indicó Arango en su publicación.
Medidas de seguridad y seguimiento continuo
Las autoridades locales continúan monitoreando la situación y tomando las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los habitantes de Santiago de Cuba y otras provincias afectadas por estos eventos sísmicos. La población sigue siendo instada a mantener la calma, estar preparada para posibles réplicas y seguir las indicaciones oficiales para minimizar riesgos y protegerse adecuadamente.